TRIBUNA / El patrimonio artístico: incoando a toda mecha

TRIBUNA / El patrimonio artístico: incoando a toda mecha

“La venta del Monasterio de Casbas en Aragón, Monumento Nacional desde 1979 y Bien de Interés Cultural, para transformarlo en una hospedería ha vuelto a reactivar el debate sobre el uso y protección del patrimonio histórico.” (Aristóteles Moreno, en Público” del 06/12/2021)

Si en lugar de Casbas de Aragón decimos La Monjía de Soria, nos situamos en el lugar que interesa para seguir, para reactivar, para continuar dando martillazos a un clavo que nunca se clava. Que nunca vuelve a la ferretería tampoco, que siempre te amenaza, oxidado, en clavarse donde no debe. ¡En una hospedería! (Amo, de viaje, las hospederías.)

Yo empezaría por separar el uso de la protección de algo tan especial como es eso del patrimonio histórico por eso, por ser tan especial, en esa temible generalidad tan lejana del caso concreto. Como no podemos referirnos a cuatrocientos casos concretos (o cuatro mil quinientos cuarenta y ocho casos concretos, es un decir) a la vez, vamos a referirnos a uno. Es mucho más cómodo. Lo que pasa es que pagamos lo cómodo por lo temible. Aunque la temible generalidad, dicho sea de paso, es también comodísima. Mata los pájaros de un tiro.

Intentaré situarme dentro de la penumbra intermedia. Me apresuro a decir que la penumbra intermedia no es, ni muchísimo menos, la falacia equidistante. Sería idiota situarse entre Casbas y nuestra Fuentetoba. Sería imbécil situarse en Tarazona. Estúpido en su hermosísima catedral. Pero también dificilísimo situarse en esa penumbra intermedia que por otra parte no lo es tal. Antes bien efecto óptico, fogonazos alternativos de vivísima luz entre apagones definitivos de tenebrosa tiniebla, todo ello a mayor velocidad de la permitida.

Primer fogonazo de luz vivísima: cualquier persona puede iniciar el procedimiento para que un inmueble sea declarado BIC.

Primer apagón definitivo de negrísima tiniebla que sigue a la triple sucesión de vivísimas luces: La ermita de San Saturio, el palacio de la Audiencia y la ermita de la Monjía de una tacada, fueron declarados hoy (29/07/2021) Bienes de Interés Cultural con categoría de Monumento por el Consejo de Gobierno de la Junta (cyltv.es), cuarenta años después de que se iniciasen los trámites administrativos para ello. (¡¡¡¡¡40!!!!!) (¡¡¡¡¡años!!!!!)

Fogonazo de vivísima luz blanca: no tengo que salir corriendo hacia el edificio múltiple de la Junta porque la Junta incoa la inclusión. Ya la incoó.  

Me sucede un apagón negrísimo porque ágilmente consulto en la web lo de los bics, concretamente me voy a la página web patrimoniointeligente.com y me asesoro acerca del procedimiento según el cual se incoó.

Como ya pasaron cuarenta años ya no pasa ni uno más, un triple relámpago de luz cegadora me deslumbra en La Monjía, en el Palacio de la Audiencia y en la ermita de San Saturio, que no es la del Mirón sino la otra. Acerca de la ermita del mirón, por ahora, no se incoa nada.

El siguiente apagón sobreviene como es debido. Me limito a reconducirles por la página citada del llamado patrimoniointeligente.com. Y no abandono. Al revés. No hay nada como esta situación comprometida para comprometerse. Se hace camino al andar y solo se puede andar anclando un pie, atornillando un pie, hincando un pie en el suelo, incoando el anclaje de un pie en el suelo negro tenebroso para que el otro, en alegre y despreocupada pirueta, hienda el aire luminoso puntera en alto, patada inocente que no puntapié, para incoarse nuevamente y en picado al negro suelo con la santísima esperanza de que su compañero, el otro pie, inicie su volátil andadura. Me comprometo a todo ello.

Que rueden las cámaras en velocísima frecuencia para poderlo ver a cámara lenta, que yo, ya digo, no abandono. Ahora mismo me pongo a reactivar el debate sobre el uso y protección del patrimonio histórico. Bajo corriendo las escaleras de mi casa. Corro hacia el edificio múltiple de la Junta de Castilla y León y pregunto a mascarilla, gel y a bocajarro por la ventanilla de la incoación. El apagón sobreviene soberano: no existen ventanillas para incoar. Existe la cita previa. Luz cegadora e inmediata. Pido cita previa. Nuevo apagón.

Pero sigo sin abandonar. Priorizo. Me voy de inmediato a Murcia para decirles cuatro cosas a los del patrimoniointeligente.com y volver de inmediato a Soria pasándome por Casbas antes de sacar unas cuantas fotos a la Monjía de Fuentetoba por si la derribasen antes de que la derriben en lo que se reactiva el debate sobre uso y protección del patrimonio histórico, porque “la cifra concreta de monumentos BIC vendidos cada año permanece en la más absoluta opacidad […] por motivos de protección de datos” (Público, 06/12/2021, a propósito de la venta del monasterio de Casbas) y además porque creo que si proteger el patrimonio histórico supone proteger al tiempo los datos que desprotegen al patrimonio histórico, tengo que volver a priorizar, lo que por otra parte tampoco me importa porque sigo sin abandonar, porque ya digo, la idea de abandonar la he abandonado de manera definitiva porque sigo sin abandonar. Usted puede incoar también. Incoemos.

Fdo: Ángel Coronado