Orgullo LGTBIQ
Daniel Rodrigálvarez remite esta carta al director en la que valora las celebraciones del Orgullo LGTBIQ y cuestiona si son necesarias.
Las alegaciones rechazadas y no notificadas
Orgullo LGTBIQ
Un año más, el colectivo de lesbianas, gays, bisexuales y transexuales, intersexuales y demás (LGBTIQ) está celebrando estos días en distintas ciudades de la geografía española, de forma singular y de carácter internacional en Madrid, el alarde de su condición sexual, con multitud de actos y manifestaciones.
La condición y orientación sexual es una característica personal de cada individuo y, en principio, no tendría el porqué dedicársele ningún recuerdo singular ni precisar de manifestaciones a su favor.
Es cierto que en el pasado su condición fue, en general, denostada y vilipendiada, y muchas de dichas personas lo han padecido severamente, pero de eso ya ha pasado mucho tiempo.
Sin embargo lo que extraña es que cada año, en su recuerdo, se hagan multitud de manifestaciones con tanto bombo y parafernalia, como si fuera un logro excepcional. Excepcional, de verdad, si que fue la erradicación de la esclavitud y del racismo y no se celebran todos los años manifestaciones de personas negras alardeando por ello.
Pero el motivo principal de todos estos actos y manifestaciones no es recordar que ya no están sometidos (as) a vejaciones, sino para mostrar con orgullo su orientación sexual, cosa que suele hacerse muchas veces de forma provocativa, hortera y chabacana.
Orgulloso puede sentirse una persona por sus propios méritos a los que ha dedicado sus esfuerzos, pero no por su orientación sexual innata.
Hay muchas personas gays, lesbianas, bisexuales, transexuales, intersexuales y demás que llevan su condición sexual con normalidad en su vida laboral y social, sin sufrir ningún rechazo, como todos los demás, que no están en absoluto a favor de estas manifestaciones.
No entienden, no se entiende, ese orgullo, a no ser que inconscientemente enmascare un complejo profundo.
La sabiduría popular nos lo enseña claramente: “Dime de lo que presumes y te diré de lo que careces”.
Fdo: Daniel Rodrigálvarez Encabo