Nuevo escudo para Río Duero Soria
El Río Duero Soria ha presentado el nuevo escudo del club, que identificará gráficamente a la entidad una vez que finalice la presente campaña 2020-2021 de la Superliga masculina de voleibol.
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La imagen del nuevo escudo ha sido diseñada por Manuel Sevillano y tiene como objetivo actualizar y renovar el emblema que acompaña a los celestes desde 2013.
Para ello, se simplifican los elementos del primer escudo para facilitar su identificación, mejorar la visibilidad, así como aumentar su versatilidad para poder emplearse en nuevos soportes.
Sevillano se ha enfrentado a un importante y complejo desafío, ya que por un lado el club quería mantener ciertos elementos del primer escudo que permitiesen su identificación y reconocimiento, mientras que se hacía necesario la simplificación visual y actualización de varios aspectos. De esta forma, el nuevo escudo conserva un balón de voleibol, que ha sido actualizado con la inspiración de los modelos actuales de balones oficiales de voleibol.
También se ha eliminado el color amarillo del mismo para reducir el número de elementos cromáticos.
La ese de Soria se ha fusionado en el nuevo balón, adquiriendo al mismo tiempo un interesante concepto representativo de un río, en este caso, como no puede ser de otra forma, el Duero, sin ir más lejos con los sugerentes y constantes virajes que acomete pocos metros después de abandonar la ciudad de Soria.
En el caso del texto, la tipografía que reflejaba el nombre del club ha sido modificada por unos caracteres con mayor personalidad y singularidad, a la par que modernos y actuales con líneas muy simples de palo seco.
Por último, la uve de voleibol se mantiene, pero ahora se convierte en un símbolo de visto, también conocido como marca de verificación o tic, que supone la introducción de un interesante y versátil elemento gráfico.
En este caso, el nuevo escudo posee unas cualidades gráficas que refuerzan de forma sobresaliente la capacidad de identificación del escudo en una marca propia, como si de un logotipo se tratara.
Lo que permitirá potenciar la imagen del club en un momento en el que no dejan de incrementarse los medios de comunicación y redes con las que compartir la pasión del voleibol con sus aficionados. En este sentido, Sevillano ha diseñado un sencillo manual de identidad corporativo para facilitar la aplicación del logotipo en diferentes situaciones visuales y cromáticas, así como en diferentes soportes.
Por tanto, el momento de la renovación del escudo del club no ha sido arbitrario, ya que responde a los nuevos desafíos gráficos a los que se enfrentaba el primer escudo del club, así como a la importante renovación que se está llevando a cabo dentro del Río Duero Soria, con la potenciación de su imagen, el trabajo de las categorías inferiores y el impulso que aporta la nueva directiva del club presentada a comienzos de temporada. En este sentido, el presidente de la entidad, Alfredo Cabrerizo, cree que el nuevo escudo es “un regalo de Manolo a la entidad”, ya que mantiene la identificación del primer escudo, pero lanzando un mensaje de modernidad y dinamismo, con el que el club debe trabajar ahora para impulsar los valores de marca.
En cualquier caso, Cabrerizo reconoce que cambiar de emblema no es sencillo debido a los valores emocionales que implica.
De hecho, el escudo diseñado por Nacho Lapuerta en 2013 ha acompañado al Río Duero Soria en la Superliga masculina de voleibol desde los primeros pasos de la entidad.
Por eso, el club quiere presentar a sus seguidores este nuevo escudo “con toda la ilusión” y el convencimiento de que supone una importante mejora, mientras que en los próximos meses de competición servirán para despedir a una imagen que será historia del club para siempre.
El primer escudo
El primer escudo del Río Duero Soria fue creado por el ingeniero informático soriano Nacho Lapuerta en 2013.
Amante del deporte soriano y, cómo no del voleibol, Lapuerta recuerda cómo se fraguó la creación de esta imagen, que realizó “de forma totalmente amateur, ya que no soy diseñador gráfico”, ha explicado.
Al terminar la campaña 2012-2013 de Superliga y comunicar el Numancia CMA que renunciaba a la plaza de la máxima categoría del voleibol nacional, un grupo de aficionados se aglutinaron bajo el nombre de ‘Salvemos al voley’ para recopilar apoyos de cara a lograr mantener la representación soriana en la máxima categoría.
En este grupo de aficionados estaba Ángel Romera, posteriormente vicepresidente y fundador del Río Duero Soria, quien conocía personalmente a Lapuerta, al que llamó para pedirle ayuda de cara a buscar una imagen que representase a ‘Salvemos el voley’.
“Fue prácticamente de un día para otro. Surgió la idea de poner una uve de voleibol, un símbolo de dólar, poner un ese o ese y una ese, a su vez, de Salvemos el voley”, ha apuntado.
Como el objetivo era buscar reunir recursos para mantener económicamente un club en la Superliga masculina de voleibol y evitar la desaparición de la representación soriana en la máxima categoría, el logotipo con el símbolo del dólar era realmente clarificador.
Unos meses después, la creación del club propició que se reciclase la imagen, que ya conocían los seguidores de este deporte, hasta convertirla en el escudo actual con la supresión del símbolo del dólar y la incorporación del nombre del club. Claro que hasta que no vio por primera vez su escudo en la equipación oficial del Río Duero Soria, Nacho no fue consciente de la trascendencia que había cobrado una imagen que ya forma parte de la historia de este deporte en Soria.
