Setecientos setenta resineros producen 12.313 toneladas en la Comunidad
Análisis del sector en la Mesa Regional de la Resina
Acceso a la Universidad desde la FP
IU pide el voto útil para contar con grupo parlamentario propio en las Cortes regionales
El sector de la resina cuenta en Castilla y León con 770 resineros, con una producción de 12.313 toneladas y su valor económico alcanza los 12,3 millones de euros.
La consejera de Agricultura y Ganadería, Silvia Clemente, ha asistido hoy la reunión de la Mesa Regional de la Resina, un encuentro en el que se ha analizado la evolución del sector y las perspectivas de futuro.
Castilla y León ha sido siempre la principal Comunidad productora del país, con el 95 % de la producción nacional, y una de las más importantes del mundo.
En España y Portugal la resina proviene del pino negral o resinero -Pinus pinaster-.
Castilla y León cuenta con 400.000 hectáreas, repartidas en todas las provincias, de esta superficie arbórea, lo que supone el 28 por ciento de los pinares negral de España y el 9 por ciento de la superficie mundial.
Además, el sector destaca por su calidad. La mayoría de los montes objeto de aprovechamiento de resina de la Comunidad cuentan, desde 2004, con certificado en Gestión Forestal Sostenible bajo el sistema PEFC, que avala y garantiza su comercialización y contribuye a una mejora continuada de su gestión.
Segovia es la provincia que mantiene la mayor producción, por la productividad de sus pinares, de 3 a 4 Kg/árbol, unas condiciones fisiográficas más favorables, la cercanía de la industria transformadora y el personal que trabaja en el sector. Además en la provincia segoviana se concentran las dos principales empresas del sector en la Comunidad: Unión Resinera Española, que posee un fábrica en Coca y ahora está en manos del mayor grupo productor de Brasil -Resinas do Brasil-, y Resinas Naturales, que posee una fábrica en Cuéllar y otra en construcción también en esa localidad.
Con el objetivo de impulsar el sector de la resina, el Programa de Desarrollo Rural 2014-2020 cuenta con una serie de medidas de apoyo entre las que destacan las ayudas a la inversión a las industrias transformadoras de resina y la realización de proyectos de innovación en materia forestal.
SECTOR EN EVOLUCIÓN
Se trata de un sector, como se ha puesto de manifiesto en el encuentro, que ha ido evolucionando en los últimos cuatro años. El número de resineros se ha multiplicado por cuatro al pasar de 177 a los 770 actuales, también se ha multiplicado por seis la producción al pasar de 2.189 toneladas a las 12.313 actuales y su valor por ocho al pasar de 1,5 millones de euros a los actuales 12,3 millones.
Esta evolución ha estado motivada principalmente por el trabajo del sector en colaboración con el Gobierno autonómico en fomentar la mecanización de la extracción de la resina y en la cooperación territorial para así mejorar la competitividad.
En la reunión se han analizado las posibilidades de futuro. Este sector demanda empleo, al crearse un puesto de trabajo por cada 160 hectáreas. Lo que supone que, de alcanzarse una producción de 15.000 toneladas, podrían consolidarse más de 1.000 empleos directos.
Con el fin de impulsar la modernización del sector, como se ha puesto de manifiesto en el encuentro, es necesario aumentar la productividad por trabajador, al potenciar la mecanización y una nueva organización del trabajo, especialmente de la recolección o remasa; integrar las labores de resinación y de tratamiento selvícola en la prevención de incendios de los pinares. También, se requiere una nueva organización, donde los trabajadores resineros no dependan laboralmente de las empresas industriales, ni de los propietarios de los montes. Los resineros deben integrarse en empresas de aprovechamientos y trabajos forestales que realicen conjuntamente tanto la extracción de resina como el cuidado de los pinares, y que lo afronten con una visión empresarial.
El sector se debería organizar como una Organización Intersectorial Agroalimentaria, en la que se negocien modelos de contratos, niveles de precios y el resto de las condiciones para el desarrollo de la actividad.