Unicaja Banco: la caída del PIB regional, del 9,1 al 12,1 por ciento
Unicaja Banco estima en su último informe económico que el PIB regional podría descender entre un 9,1 por ciento y un 12,1 por ciento, en línea con las expectativas para España.
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No obstante, el informe trimestral "Situación económica y perspectivas de las provincias de Castilla y León", elaborado por Analistas Económicos de Andalucía, sociedad de estudios del GRupo Unicaja Banco, no descarta un mayor impacto si la situación sanitaria empeora.
La actividad comenzaría a recuperarse a partir del segundo trimestre del año y en 2021 la economía regional podría crecer entre un 6,9% y un 8,5%.
Sin embargo, la incertidumbre sigue siendo muy elevada, lo que confiere una gran complejidad a la realización de previsiones.
De acuerdo con dichas estimaciones, en el escenario más favorable, las caídas de la actividad en 2020 en las provincias de Castilla y León podrían oscilar entre el 7,9% de Ávila y el 10,3% de Burgos, y, en la situación más desfavorable, los descensos podrían variar entre el 11,5% de Segovia y el 12,8% de Burgos, superando el 11,5% en todas las provincias
Previsiones sobre la evolución de la actividad económica en las provincias de Castilla y León. 2020
Tasas de variación anual en %
Escenario más favorable |
Escenario menos favorable |
|
Ávila |
-7,9 |
-11,6 |
Burgos |
-10,3 |
-12,8 |
León |
-9,0 |
-11,8 |
Palencia |
-10,2 |
-12,6 |
Salamanca |
-8,2 |
-11,6 |
Segovia |
-8,2 |
-11,5 |
Soria |
-9,6 |
-12,4 |
Valladolid |
-9,1 |
-12,3 |
Zamora |
-8,9 |
-12,1 |
Castilla y León |
-9,1 |
-12,1 |
Fuente: Analistas Económicos de Andalucía. |
El informe se estructura en tres apartados: en el primero se describe el contexto económico internacional y nacional y se recogen los principales rasgos del comportamiento reciente de la economía regional; en el segundo se realiza una breve comparativa de los principales indicadores de las nueve provincias de Castilla y León, y, finalmente, el último recoge la evolución de los principales indicadores económicos para cada una de las provincias, así como las previsiones sobre la evolución de la actividad económica para 2020.
Según las estimaciones del Indicador Sintético de Actividad de la sociedad de estudios del Grupo Unicaja Banco, en el primer trimestre de 2020 la actividad económica ha registrado un retroceso generalizado en las provincias de Castilla y León, superando el promedio regional (-3,2%) en Burgos (-3,7%), Palencia (-3,5%), León (-3,4%) y Zamora (-3,4%), si bien estas tasas no serían estrictamente comparables.
En cuanto al empleo, en el acumulado de enero a junio de 2020, el número de trabajadores afiliados a la Seguridad Social ha descendido un 1,6%, en términos interanuales, con una caída generalizada por provincias. En Palencia, Burgos, Zamora y Salamanca la bajada supera el promedio regional señalado. En este sentido, la disminución de la afiliación ha sido más intensa en las provincias con un mayor peso del sector industrial, como es el caso de Burgos y Palencia.
En el actual contexto, las estimaciones de la sociedad de estudios del Grupo Unicaja Banco para las provincias de Castilla y León apuntan a un fuerte descenso de la actividad económica en 2020. En el escenario más favorable, las bajadas en la actividad podrían oscilar entre el 7,9% de Ávila y el 10,3% de Burgos, mientras que, en el supuesto más desfavorable, las caídas se situarían entre el 11,5% de Segovia y el 12,8% de Burgos.
En el primer trimestre del año, según los últimos datos de la Contabilidad Regional Trimestral de Castilla y León, el PIB descendió en la región un 3,2% en términos interanuales, como ya recogía el informe ‘Previsiones Económicas de Castilla y León’, de Analistas Económicos de Andalucía, publicado recientemente. La demanda interna restó 3,8 puntos porcentuales (p.p.) al crecimiento regional, produciéndose un fuerte descenso del consumo de los hogares (4,5%) y de la inversión (8,1%).
Por su parte, según los datos de la Contabilidad Regional Trimestral de Castilla y León, el Valor Añadido Bruto (VAB) aumentó en el sector agrario (5,4%), en las ramas energéticas (9,3%) y en los servicios no de mercado (3,8%), disminuyendo en la construcción (-8,4%), los servicios de mercado (-4,9%) y la industria manufacturera (-4,5%).
Algunos indicadores disponibles para el segundo trimestre apuntan a una cierta estabilización a partir de mayo. En esta línea, las cifras de afiliación a la Seguridad Social han mejorado en los meses de mayo y junio, aunque en términos interanuales muestran una caída del 3,7% respecto al segundo trimestre de 2019. En concreto, entre abril y junio, el número medio de empleados afiliados ha aumentado en más de 8.800 personas, tras descender aproximadamente en 30.400 entre febrero y abril.
Además, entre abril y junio, el número de trabajadores en situación de ERTE por fuerza mayor se habría reducido a algo menos de la mitad, hasta los 63.464, según cifras del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, que se incluyen en el documento ‘Previsiones Económicas de Castilla y León’, publicado recientemente.