Los castellanistas piden 500 millones para paliar déficit de inversiones
El Partido Castellano Tierra Comunera (PCAS-TC), ha calificado hoy de "injusto y discriminatorio" el reciente acuerdo bilateral alcanzado entre el Gobierno central y la Generalitat de Cataluña mediante el cual se transferirán a la comunidad catalana 1.459 millones de euros para financiar infraestructuras, inversiones y gastos de la policía autonómica.
Tres de cada diez visitantes de casas rurales son ecoturistas
CSIF pide mayor esfuerzo para estabilizar la plantilla docente
Este acuerdo supone para los castellanistas recortar la disponibilidad de fondos para Castilla y León y en general para el conjunto de las comunidades autónomas españolas.
La formación castellanista ha valorado en un comunicado como absolutamente inaceptable que el Gobierno de Pedro Sánchez, como anteriormente hacía el de Mariano Rajoy, utilice los recursos de todos y los presupuestos de todos para alcanzar acuerdos que privilegian a unos territorios mientras discriminan a otros –los más desfavorecidos- al tiempo que pretenden exclusivamente –con criterios meramente partidistas- mantener apoyos parlamentarios, contentar a comunidades poco respetuosas con el interés general y alimentar su campaña electoral permanente con inversiones que deben distribuirse con criterios objetivos y en función de las necesidades reales.
El PCAS-TC ha reclamado un trato similar para Castilla y León, de forma que se reclama al ejecutivo de Pedro Sánchez 500 millones de euros para intentar paliar el déficit de inversiones que esta comunidad autónoma castellana arrastra desde hace más de veinte años en materia de autovías, ferrocarriles e inversiones en infraestructuras.
Además los comuneros, y dado que el Gobierno central aprobará en Consejo de Ministros la autorización a la Generalitat para que pueda refinanciar deuda a corto plazo y convertirla en deuda a largo plazo por importe de 2.773 millones de euros, un trato similar para la deuda de la Comunidad de Castilla y León, que es preciso recordar que es un territorio con una deuda inferior a la media del Estado y que además mantiene un menor porcentaje de su deuda con el Gobierno Central, acudiendo fundamentalmente al mercado para solventar sus necesidades de liquidez.
Para el PCAS-TC, tratos de favor como este nuevo “regalo” financiero a la Generalitat catalana, como el Cupo Vasco o Navarro o el pago de compensaciones a algunas comunidades para garantizar determinados apoyos parlamentarios, evidencian el descrédito del actual modelo territorial autonómico, especialmente en su configuración económico, y muestran la urgente necesidad de reformular el modelo territorial español y diseñar un nuevo modelo de financiación autonómica, que garantice suficiencia financiera a todos los territorios y al tiempo garantice la calidad en la prestación de los servicios públicos esenciales a todos los ciudadanos, con independencia de su lugar de residencia, algo que está claro que no es una prioridad para el PSOE, como anteriormente no lo fue para el PP.
Los castellanistas han reclamado que todos estos aspectos se discutan en foros multilaterales, con representación de todas las comunidades autónomas, no en encuentros bilaterales que privilegian a los actores presentes y discriminan a los excluídos y vuelven a poner sobre la mesa la necesidad de un nuevo modelo territorial para España, basado en el federalismo solidario, con comunidades con los mismos derechos y deberes y que supere la división artificial de Castilla en cinco comunidades, uno de los principales errores de la transición democrática y del actual modelo autonómico.