Un año de prisión por acosar a su ex-mujer
Jueves, 19 Noviembre 2020 12:53
La Audiencia provincial de Soria ha confirmado íntegramente la sentencia dictada el 15 de julio de este año por el Juzgado de lo Penal número 1 de Soria que ha condenado a un año de prisión a un hombre por acosar a su ex-mujer con llamadas telefónicas, whatsApp, Messenger y correos electrónicos.
La citada audiencia, según la sentencia facilitada este jueves por el gabinete de comunicación del TSJCyL, ha desestimado el recurso de apelación interpuesto por el condenado, por entender, en esencia, error en la valoración de la prueba y vulneración del principio de presunción de inocencia, y de forma subsidiaria, solicitar rebaja de la pena impuesta. La Audiencia provincial ha señalado en su sentencia que la lectura de los fundamentos jurídicos de la sentencia del Juzgado de lo Penal número 1 de Soria y el visionado del acta de juicio, pone de manifiesto la existencia de suficiente prueba de cargo, apta para enervar la presunción de inocencia, valorada de forma razonable y razonada por la juzgadora, que le lleva a estimar que los hechos sucedieron tal y como expresamente se han declarado probados. Por ello, la Audiencia ha desestimado el recurso de apelación y ratificado la sentencia condenatoria de un año de prisión, por un delito de acoso en el ámbito de la violencia contra la mujer, así como la inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de duración de la condena y tres años de prohibición de acercarse a menos de 150 metros de la persona, domicilio y lugar de trabajo de su ex-mujer y de comunicar con ella, directa o indirectamente, por cualquier medio o procedimiento. La sentencia recurrida declaró probados que el condenado, que había estado casado desde 2016 hasta julio de 2019 con la denunciante, contactó con la ex-mujer durante casi tres meses a través de teléfono móvil, enviándole hasta 200 mensajes de whatsApp sobre su ruptura sentimental, con numerosas recriminaciones. Tras bloquear la mujer el teléfono y el whatsApp a finales de septiembre de 2019, el acusado remitió mensajes a través de correo electrónico y la aplicación Messenger, con fotografías de su boda, personales de su ex-mujer y de sus perros. También el condenado le dejó tarjetas en el parabrisas del coche y el día de su cumpleaños le envió un regalo y un poema, además de introducirse en su vivienda sin su conocimiento, aprovechando que tenía llaves de la vivienda común adjudicada a su ex esposa, incluso a horas intempestivas de la noche. La sentencia señala que toda esta situación de "hostigamiento y seguimiento permanente" provocó en la denunciante una alteración de su forma de vida, llegando a cambiarse de domicilio y de número de teléfono, y renunciando a sus rutinas diarias, sumiéndole en un estado de intranquilidad.