Luis Castro explica la historia frustrada del Centro de Investigación Nuclear de Soria
Presentación de su libro en el Casino Amistad Numancia
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El profesor de Geografía e Historia y escritor Luis Castro presenta el próximo lunes en Soria, en el Casino Amistad Numancia (20:00 horas), su libro "La bomba atómica española", un estudio histórico sobre el proyecto del Centro de Investigación Nuclear II que la Junta de Energía Nuclear comenzó a construir en Matas de Lubia (Soria) en 1976.
Según la documentación oficial el Centro se dedicaría a investigación avanzada sobre reactores rápidos (FBR), reprocesado de combustible irradiado, fabricación de isótopos y fusión nuclear.
El libro aborda un asuntyo poco conocido del final del franquismo y de la Transición como los planes -finalmente frustrados- para que España entrara en el Club Atómico y diseñará una política exterior y de defensa más autónoma y capaiz. Junto al vasto plan de centrales nucleares, el Centro de Investiguación Nuclear II, en Matas de Lubia, iba a ser la clave, al cerrar el ciclo energético del uranio y derivarlo a posibles usos militares mediante el reprocesado, el plutonio y los reactores rápidos.
El CIN II hubiera sido el eslabón conector del ciclo civil del uranio con su uso militar en España, apreciación a la que el autor llega por evidencias indirectas, pues las autoridades nunca reconocieron abiertamente ese aspecto.
El CIN II encajaba en los planes energéticos de la época, que se volcaban en la perspectiva del “todo eléctrico, todo nuclear”, con unas previsiones de futuro desmesuradas que no tenían en cuenta los efectos de la crisis ni los problemas de todo tipo inherentes a la energía nuclear.
Los efectos de la crisis económica y las presiones de EE.UU. y de los organismos occidentales dieron al traste con el proyecto del CIN II, que se reconvirtió hacia las energías alternativas (CEDER) ya en los años ochenta.
En ese resultado también incidió la lucha de un movimiento ecologista y antinuclear entonces incipiente. El ingreso en el OIEA y en la OTAN y la firma del TNPAN colocan a España en un esquema de defensa y política exterior distinto.