Doscientos niños acompañan a "La Borriquilla"
La cofradía de la Entrada de Jesús en Jerusalén comenzó a participar en la Semana Santa soriana en 1960
Un almuerzo antes de la procesión de "la Borriquilla"
La trufa negra de Soria, protagonista en la gala benéfica de la fundación Antonio Banderas
En torno a doscientos niños, pertenecientes a las nueve cofradías de Soria, han acompañado al mediodía de hoy a "La Borriquilla", como se conoce al paso procesional de la Entrada de Jesús en Jerusalén, que ha abierto un año más las procesiones de Semana Santa en Soria capital, declarada en 2008 de interés turístico regional.
Más de un millar de personas han seguido en el centro de Soria el paso de este paso procesional, desde la iglesia de la Mayor hasta la plaza de San Esteban y el regreso posterior a la concatedral de San Pedro, en una jornada calurosa y en la que se ha empezado a ver afluencia de turistas en la ciudad.
Los niños, con sus palmas a modo de báculo y detrás de los tambores de la cofradía del Santo Entierro y las cornetas de las Santas Caídas, han encabezado esta procesión, que este año ha tenido más complicada la salida desde la iglesia de La Mayor, debido al montaje de la exposición "Romanorum Vita", en la plaza Mayor.
La cofradía de la Entrada de Jesús en Jerusalén, que tiene su sede en la iglesia de La Mayor, comenzó a participar en la Semana Santa soriana en 1960 con sus hábitos formados por alba blanca y capa roja con palma bordada al lado derecho en oro.
En 2010, coincidiendo con su cincuenta aniversario, la hermandad se constituyó oficialmente en cofradía, una vez que el Obispado de Osma-Soria aprobó sus estatutos.
El desfile tiene como protagonista a los niños, que visten el hábito propio de su hermandad, sin capuchón, y portando su respectiva palma.
En la Semana Santa soriana se celebran nueve desfiles procesionales, desde el Domingo de Ramos hasta el de Resurrección, en el que participan cerca de dos mil cofrades.
La Semana Santa de Soria es única en Castilla y León por seguir con precisión cronológica lo acontecido durante la Pasión de Cristo, de tal forma que se dramatiza en la calle los diferentes pasajes bíblicos que relatan la Muerte y Resurrección de Jesús.