La ganadería de Adolfo Martín, en Almazán
Los toros que se lidiarán en Almazán el próximo 3 de septiembre son de la prestigiosa ganadería de Adolfo Martín Andrés.
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En el corazón de Extremadura, Adolfo Martín Escudero asumió hace décadas la difícil tarea de conservar y hacer crecer uno de los pocos y complejos hierros descendiente directo de Albaserrada.
El toro en su plenitud, el trapío y la bravura como objetivos ciertos, hacen de este hierro de la V, el más laureado de los últimos años.
La ganadería luce divisa verde y roja, con un hendido en ambas orejas como señal. Tiene su finca en la localidad de Escurial (Cáceres).
La ganadería de Adolfo Martín ingresó en la Asociación de Ganaderías de Toros de Lidia en el año 1952.
En 1965 compró la ganadería Escudero Calvo, que anteriormente se anunciaba con el nombre de Marqués de Albaserrada.
Por tanto, la procedencia de los toros de Adolfo Martín es Santa Coloma y Saltillo.
Adolfo Martín comenzó a gozar del prestigio que merece como ganadero principalmente a partir de la temporada del 99.
Lagartijo, un toro lidiado en la tarde del 7 de junio en la Feria de San Isidro (Madrid) obtuvo el trofeo como mejor toro del ciclo de Las Ventas.
Ese año también logró un gran triunfo con sus novillos en la localidad riojana de Arnedo.
En el año 2000 Adolfo Martín regresó a Las Ventas con la categoría de uno de los hierros más admirados por los aficionados toristas.
En aquella ocasión, el ejemplar Malagueño II, toreado el 4 de junio, se alzó con los reconocimientos de los jurados.
A pesar de estos premios, Adolfo Martín no ha logrado, a su pesar, quitar a sus toros la etiqueta de 'victorinos duros' (el ganadero es hermano de Victornio Martín Andrés), a pesar de que siempre ha señalado que sus toros son encastados, no duros.