TRIBUNA / El beso criminal y traidor
Amalio de Marichalar contrasta en este artículo de opinión el polémico beso que el presidente de la RFEF, Luis Rubiales, dio a una jugadora de la selección, con los besos "traidores" que está dispuesto a dar el presidente del Gobierno en funciones para seguir en La Moncloa.
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TRIBUNA / El beso criminal y traidor
Parece este verano que el beso de un personaje sin categoría alguna, copa toda la atención por su indudable mal ejemplo y falta absoluta de buen comportamiento ante las televisiones de muchas partes del mundo incluso siendo un beso a todas luces consentido en el fragor de un momento eufórico. Si no fuera así, además de todo, sería recriminable, sin duda, como lo ha sido siempre, sin que nadie nos enseñe nada nuevo.
Por cierto, si ese beso se hubiera producido entre dos hombres o dos mujeres, además estarían según quien en el gobierno saltando de alegría como “modélico y ejemplar”, y ni se pararían a pensar si es consentido o no, como ha ocurrido otras veces.
Sin embargo, lo que no se oye ninguna crítica desde el Gobierno es del gesto soez e impresentable de este mismo personaje, exponiendo sus partes impudicamente desde el palco, ante la Reina, la Infanta y personalidades internacionales, contemplado por medio mundo también, y que es el que realmente deja la imagen, la educación y las mínimas buenas maneras de comportamiento de España por los suelos.
Nadie en el Gobierno ha hecho saber esto.
Nada se dice con todo este bochorno en la propia España de nuestras jugadoras de fútbol y su proeza mundial. Un despropósito y también un escándalo que constatan todos los que observan nuestro comportamiento a nivel global.
Si nada de esto tiene mínimo pase, resulta que las jugadoras son recibidas en Moncloa por su titular y al frente quien ha provocado un gesto despreciable desde el palco. ¿Se le dice algo sobre ello ? Nada. Solo cuenta lo del beso y solo le pide que no son suficientes las disculpas dadas. Pasan los días y el beso - siendo impresentable, aún consentido - es cada vez excusa más grande de un filofeminismo adulterado y manipulado por el Gobierno. Pero hete aquí que ese mismo Gobierno ha permitido a más de mil agresores sexuales rebajar sus penas y más de cien salir de la cárcel y en estas mismas horas uno de ellos intentar de nuevo en Dos Hermanas una nueva violacion. ¿Ha salido el presidente del Gobierno impulsor y máximo responsable de ello, quien dijo que era lo del “si es si” una ley ejemplar en el mundo, junto a sus vicepresidentas y ministras cómplices de tal perversion, a denunciar, perseguir y condenar tal hecho? ¿Ha salido el Gobierno en tromba como con lo del beso admitido pero exacerbado de manera maligna a denunciar y condenar sin paliativos a este malhechor, este violador, de Dos Hermanas?
Pero si todo esto es gravísimo e incomprensible y se permite este gobierno dar lecciones de ejemplaridad por un beso y forzar por ello una dimisión cuando ha escondido de manera cómplice al mismo personaje que encubría oscuros manejos aún por dilucidar, y que algunos de ellos afectan a un equipo catalán y todo esto parece menos importante que un beso … si todo esto es así ¿que es lo que se quiere tapar? ¿Hay lógica, coherencia, alguna seriedad, mínima honestidad?
Pues bien, un beso es objeto de polémica, atizada desde aquí y desde el Gobierno a nivel internacional, sin decir nada de lo que se contemporizó en el mundial de Qatar, sin defender allí a las mujeres, y además sin decir nada tampoco se permite desde aquí a violadores que salgan de la cárcel, y esos mismos vuelvan a delinquir … ¡ejemplar !
Pero es que además aquí se permite, y todos los días, dar un beso criminal y de traición a quien da un golpe de Estado, se da un beso criminal y de traición a quienes tienen listas electorales ensangrentadas, se da un beso criminal y de traición a quienes quieren imponer el comunismo y vías de autodeterminación, y se está dando un beso criminal y de traicion a quien es un prófugo y fugitivo, haciéndole cómplice de la formación de un Gobierno.
¿Un beso a malhechores, criminales, terroristas, delincuentes, fugitivos,…, jefes todos ellos de los partidos con los que está pactando el Gobierno, para ser reelegido, y también a asesinos en listas electorales ensangrentadas, es un beso admisible, decente, homologable, ético y ejemplar, aún siendo un beso consentido?
¿Este beso criminal y de traicion, muy bueno y ejemplar, por consentido, y además buscado y bien trabajado por ambas partes, es un beso modélico y pasional para enseñar a nuestros jóvenes con orgullo… , es un beso que endulza la ejemplar reconciliación y concordia que nos dimos hace más de 40 años ?
¿Este beso criminal y de traicion, tan honesto, decente y modélico, es homologable en cualquier democracia europea, o están todos absortos ante tal comportamiento esquizofrénico puesto en marcha como si fuéramos Venezuela?
¿Este beso criminal y de traición con criminales, delincuentes, golpistas , terroristas y prófugos para formar un gobierno es ejemplo de “progresismo” y de verdad cree el presidente del Gobierno en funciones que es la mayoría social, decente y equilibrada de España?
¿Es que estamos locos?
¿Negarse a pactar con el partido que ha ganado las elecciones, con el que formaría la aplastante mayoría social y constitucional y abandonar a socios que todos los días actúan y demuestran ganar pasos fundamentales en perjuicio de España, buscando su destrucción y la desunión y discordia de los españoles, así como atacar la Constitución e incumplir la ley es lo que hay que hacer?
¿Estamos en nuestro sano juicio en pleno siglo XXI, o esto parece un cuento sólo imaginado por una mente maligna, calenturienta y fuera de este mundo?
Resulta que un beso aparentemente consentido en un mundial es un escándalo sideral y besos de permanente, consentida y cómplice traicion con los enemigos de España es un modelo innovador y ejemplar. Besar rogándoles pacto para gobernar a malhechores, delincuentes, criminales, terroristas, prófugos y golpistas un modelo a seguir y a implantar en las democracias europeas y occidentales.
Fdo: Amalio de Marichalar. Conde de Ripalda