Los gastos de la casa y la comida se llevan la mitad del presupuesto familiar
El presupuesto familiar en Castilla y León se destina fundamentalmente a sufragar los gastos de la casa, la luz, el agua, el gas y en la cesta de la compra.
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Casi la mitad del gasto de las familias se destina a pagar la vivienda y alimentos, según refleja la última encuesta de presupuestos familiares publicada por el INE.
Solo otras cuatro autonomías –Andalucía, Canarias, Castilla-La Mancha y Extremadura– están por debajo de los 26.078 euros de desembolso anual medio de los hogares castellanos y leoneses, que, a la vez, se encuentran lejos de los 28.199 de media nacional y de los 33.691 del País Vasco, que encabeza el ranking sobre 2016.
El esfuerzo para abonar los costes de la vivienda y sus servicios energéticos es mayor en la región que en la mayoría de zonas. En Castilla y León estos conceptos absorben el 31,41 por ciento del gasto familiar (suponen algo más de 8.000 euros anuales), por encima del 30,8 por cieneto de media nacional y con una sensible diferencia frente al 27 por ciento de Murcia o el 28 por ciento de Andalucía y Canarias.
El siguiente concepto que más presupuesto percibe son los alimentos (14,6 por ciento), seguido de cerca del transporte que, en una zona tan dispersa como esta, arranca otro 11,6 por ciento del galimatías de la economía familiar.
Al año los hogares destinaron 2.720 euros a este concepto, y si la cuantía se mide por persona ésta se sitúa en los 1.167 euros.
Otro de los datos contextualizados que refleja este estudio es que los hogares de Castilla y León asumieron el 5,1 por ciento del consumo interno del conjunto de España y que el gasto por persona ascendió a casi 11.200 euros, un 0,9 por ciento más que un año atrás, frente a los tres puntos de subida nacional.
Tras las obligaciones más básicas, los restaurantes y hoteles se llevan uno de cada diez euros empleados por las familias. En dinero esto se traduce en 2.500 euros por casa y poco más de 1.000 por persona al año.
En relación con esto, el ocio y la cultura arañan el 6 por ciento, mientras La ropa y el calzado suponen un 5 por ciento de todo el presupuesto. Casi 1.400 euros por familia, y 600 por individuo.
El tabaco y las bebidas alcohólicas no representan las principales partidas, pero reciben un 1,7 por ciento del total. Las familias desembolsaron en la adquisición de ambos 450 euros en un año.
Queda la enseñanza y la sanidad, que pese a prestarse a través de servicios públicos, los castellanos y leoneses también desembolsan sustanciales cantidades para estos ámbitos.
El gasto sanitario crece un 2 por ciento y acapara el 3,4 por ciento del presupuesto, alrededor de 900 euros por hogar. Si la distribución se limita a los ciudadanos supondría casi 400 por usuario.
La enseñanza, los libros de texto, las matrículas... y el resto de conceptos ligados a la educación son los que menos proporción suponen para las familias. Se limita a un 0,9 por ciento, o, lo que es lo mismo, 250 euros por hogar.
