Montero inaugura el I Congreso Educación y Género
La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha advertido este miércoles, en la inauguración del primer Congreso Educación y Género, en el Campus de Soria, de que no se logrará acabar con las agresiones homófobas mientras se sigan blanqueando "supuestas opiniones que son vulneraciones claras de los derechos humanos" y se normalice el discurso de la extrema derecha.
Montero ha participado este miércoles en la apertura de la primera edición del Congreso de Educación y Género, organizado por la Facultad de Educación del Campus de Soria, con la colaboración de la UVa, el Instituto de la Mujer, el Ayuntamiento de Soria y la Diputación provincial.
La ministra de Igualdad, que ha presentado las líneas maestras de su departamento en materia de educación para la igualdad, ha comenzado su intervención condenando el asesinato homófobo de Samuel.
Montero ha pedido que la sociedad no eluda su responsabilidad y se ha dirigido expresamente a los medios de comunicación y a los tertulianos.
"Mientras no acabemos con este blanqueamiento, no vamos a acabar con el miedo de mucha gente a vivir su vida y mostrarse como son", ha resaltado.
"La educación para la igualdad es de las tareas más difíciles en estos momentos. Es uno de los pilares sobre los que se sostienen las transformaciones sociales profundas, que nos permita tener un país más igualitario, y quien mejor sabe eso es la extrema derecha, que ha demostrado su primera propuesta, el veto parental, para intentar convertir un derecho de los niños, como es la educación afectiva-sexual, en una opinión ideológica", ha asegurado.
Para Montero, se quiere convertir un derecho en una opción desde la extrema derecha.
La propuesta de pin parental tiene un objetivo claro, según la ministra de Igualdad, de "amenaza" a profesionales en centros educativos para evitar afrontar ciertas situaciones en las aulas e impedirles ser libres en el ejercicio de su obligación, que es garantizar la educación afectivo-sexual de todos los alumnos.
Además ha agradecido al profesorado y a quienes ocupan las coordinaciones de igualdad por realizar un trabajo que "no estaba pagado" y se enfrentan a multitud de dificultades, y que no son solo económicas.
Montero ha asegurado que el Ministerio tiene dos grandes ejes para fomentar la igualdad en el ámbito educativo.
En primer lugar, son las acciones del Instituto de las Mujeres, el primer organismo que hace políticas con perspectiva de género, por lo que ha reconocido su labor.
En este sentido ha apuntado, como ejemplo, el fomento de las vocaciones científicas en las niñas y jóvenes.
Y el segundo gran bloque, según ha expuesto Montero, tiene que ver con el impulso normativo desde el Ministerio de Igualdad para afianzar una primera generación de derechos feministas.
Montero ha citado los hitos la ley de "solo sí es sí" y la ley para la igualdad de las personas trans y LGTBI.
Montero ha señalado que incorporan medidas en el ámbito de la prevención, con un importante componente penal y, de las partes más desconocidas, el foco puesto en medidas de reparación del daño causado y de prevención de todas las formas de violencias sexuales.
Montero ha asegurado que a partir de ahora el consentimiento está en el centro y las mujeres no tienen que probar que han sido intimidas o han sufrido violencia.
"Es un cambio de paradigma muy fuerte", ha recalcado.
Por otra parte, Montero ha adelantado que en los próximos meses se quiere avanzar en la reforma de la ley de aborto.