El río Duero está enfermo a su paso por Soria, según ASDEN
Tras un análisis realizado de las "galletas" aparecidas en febrero y marzo
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La asociación ASDEN-Ecologistas en Acción ha calificado de "deficiente" y "preocupante" el estado del río Duero a su paso por Soria, tras analizar las "galletas" aparecidas a primeros de marzo y que fueron denunciadas por ciudadanos que pasean por sus márgenes.
La presencia de aglomeraciones de materia orgánica flotando sobre la superficie del río Duero no es un hecho puntual, según ha lamentado hoy en un comunicado la asociación ecologista, lo que le ha llevado a realizar un análisis básico de las muestras recogidas.
Los resultados destacan por tener una abundante fauna y flora microbiana semejante a la que se puede encontrar en un agua estancada.
"Estos resultados hacen pensar que hay una capa de materia orgánica o limo que tapiza el lecho del río, la cual pasa desapercibida en un análisis de calidad ordinaria del agua del río, pero su existencia y permanencia a lo largo del tiempo deterioran el río sin que seamos conscientes de ello", ha lamentado.
Esta materia orgánica del lecho ripario, que tiene su origen en anteriores y antiguos vertidos (legales o ilegales), ha sido procesada o transformada por el sistema ecológico del río; y por motivos que la asociación ASDEN desconoce han aflorado ahora a la superficie en forma de aglomeraciones de microorganismos.
"Esas "galletas" son simplemente el indicador o manifestación de una eutrofización y mal estado de salud permanente del río", ha denunciado.
En este sentido ha señalado que si se confirma este diagnóstico, la situación sería preocupante ya que indicaría que el Duero está enfermo, con un estado de conservación "deficiente", lo que entraría en contradicción con la calificación de "bueno" y el objetivo de conseguir "buen potencial ecológico y buen estado químico en el año 2015" establecido en el Plan Hidrológico 2015-2021 para el tramo de río entre Garray y la confluencia con el río Golmayo, en Soria-capital.
Para ASDEN, las causas de este deterioro del río Duero hay que buscarlas en el deficiente control, exigencia y responsabilidad de todas las administraciones de los vertidos y actividades contaminantes, la deficiente gestión y funcionamiento, e incluso mal diseño de la depuradoras de aguas residuales, el incremento de la cabaña ganadera porcina y la falta de control administrativo del vertido de sus purines.
