Feliz verano
Mi alarma llega a extremos cuando percibes como se puede manejar a la ciudadanía con la utilización de declaraciones calculadas, acuerdos innombrables o silencios explosivos.
De presupuesto histórico a históricas autovías
A mi entender, este es el gran momento de la ciudadanía de Soria, pero de la ciudadanía con mayúsculas pasando muy por encima de partidos políticos, de asociaciones que en momentos determinados se arrogan la representación ciudadana, o prensa que en su posición de ser un reflejo de la sociedad a la que sirve parece que se ha quedado sin capacidad de análisis.
Lo que el ciudadano debe conocer es:
Que sea cual sea el gobierno municipal, provincial o autonómico, siempre existirá un interés, o necesidad, por parte del gobierno central en la construcción de un centro penitenciario en Soria; y por tanto, siempre existirán los silencios espesos y los brindis al Sol poniendo ante la opinión pública elementos de discusión sin trascendencia. Será necesario recordar a los políticos, que los ha votado la ciudad o la provincia y es a ella a quien se deben, por encima de las relaciones de entendimiento de la organización que ha servido de plataforma para obtener los cargos. Primero son todos los ciudadanos, después los partidos. Y la ciudadanía tiene que tener muy claro que ante este asunto no va a recibir ayuda ni de partidos políticos, ni de asociaciones mas o menos relacionadas con partidos políticos, ni de gobiernos regionales (mientras el problema se plantee aquí no se plantea en otra ciudad de la comunidad), ni de nuestros directos representantes, que no tienen capacidad de maniobra, y ponerse al frente de la ciudadanía es mucho ponerse.
A la hora de establecer la afección de un centro penitenciario sobre una ciudad, lo más importante es la relación de proporcionalidad, y para esto, la primera consideración es; ¿la ciudad se encuentra aislada, o forma parte de un conjunto de núcleos urbanos más o menos cohesionados en una determinada zona? Si yo hablo de Alcalá-Meco, estoy hablando de Meco, de Alcalá, del corredor del Henares, del entorno de Madrid y por extensión de Madrid; en este marco la afección de un centro penitenciario queda socialmente minorada; es lo que a nosotros nos importa, la afección social, el resto son consideraciones menores. Muy al contrario de lo que ocurre en Soria, ciudad geográficamente aislada, con poblaciones del entorno alejadas y con un número de habitantes mínimo a los efectos que aquí nos trae, Almazán, El Burgo, Agreda, etc. Éstas no colaboran en la amortiguación de la afección social que recae en su totalidad sobre una ciudad de 40.000 habitantes (ruego no discutamos entre población de hecho, de derecho, de verano, de invierno, etc). Esta situación será ideal para el control del centro penitenciario, no lo dudo, y será muy valorada por los responsables de la institución, pero es la situación mas negativa para lo que a nosotros nos importa, la afección social sobre la Ciudad.
La proporcionalidad, (en algún medio de comunicación he visto referencias a este concepto) , setecientas y pico unidades a repartir entre la población de afección, a la hora de ajustar este cálculo desconozco si por cada unidad existe un recluso o dos, mas el centro de reinserción. Hagamos los números como queramos, cuando se hacen números es obligatorio hacerlos con precisión y yo no dispongo de todos los datos necesarios, pero con estos datos básicos es suficiente, Unidades de estancia 700; población de Soria 40.000.
Otra cuestión que se plantea también a mi entender de una forma bastante frívola; si la distancia del centro penitenciario a la ciudad es suficiente, poca o mucha; sea la que sea, el centro urbano de referencia es Soria; o es que pensamos que un señor con permiso de fin de semana va a renunciar a él por encontrarse a 3, 7, o 15 Km. de la ciudad.