¿Conducimos bajo los efectos del alcohol?
El 15 de noviembre se celebra el Día Mundial sin Alcohol, una cita que trata de hacernos reflexionar sobre las negativas consecuencias de abusar de esta sustancia. España es el país europeo en el que se consume con más frecuencia. Sin embargo, este no es el único problema: porque, ¿conducimos bajo los efectos del alcohol? El comparador de seguros Acierto.com lo analiza.
TRIBUNA / La España semiolvidada
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Así, los datos de su última encuesta son escalofriantes: el 45 por ciento reconoce haber conducido después de consumir alcohol.
Y hasta el 14% asegura que actúa de esta manera con regularidad.
El mismo porcentaje dice haber conducido alguna vez superando la tasa legal de alcoholemia (sabiendo que lo hacía y que estaba poniendo en peligro su seguridad y la del resto).
De hecho, detrás de esta forma de proceder no se encuentra el desconocimiento, sino que casi 9 de cada 10 afirman conocer el límite legal de alcoholemia.
En el lado contrario encontramos a los que no beben cuando conducen: el 60 por ciento indica que evita el alcohol por miedo a una posible multa. Un punto en el que, de nuevo, la falta de seguridad no entra en juego. autónomas.
Pero, ¿cuáles son las consecuencias? Según los datos que maneja Acierto.com, el 48,7 por ciento de los conductores fallecidos en accidentes de tráfico en 2020 había consumido alcohol, drogas o psicofármacos (un 3,2% más que el año anterior).
La mayoría de ellos eran hombres (el 95%).
Y el 68,5 por ciento de los fallecidos se encontraban entre los 25 y los 54 años.
Si nos centramos en las sustancias consumidas, el alcohol continúa siendo, con diferencia, la más habitual. Le siguen las drogas y los psicofármacos.
También llama la atención la alta tasa de alcohol de los conductores que perdieron la vida bajo sus efectos: casi el 80 por ciento estaba por encima del 1,2 g/l.
Pero no solo los fallecimientos son importantes sino los accidentes en general: el alcohol se encuentra detrás del 60% de los siniestros.
Y el riesgo de tener un accidente de tráfico se multiplica por 25 cuando la presencia de alcohol en sangre alcanza entre los 1,5 y 2,4 g/l.
Las cifras resultan todavía más preocupantes si tenemos en cuenta la caída de desplazamientos que se produjo en 2020 como consecuencia de la crisis del coronavirus, la implementación del teletrabajo, etcétera.
Qué ocurre con el seguro si tengo un accidente borracho
Llegados a este punto, “no podemos olvidar cómo actuará el seguro del coche si tenemos un accidente de tráfico borrachos”, añaden los expertos de Acierto.com.
Por regla general, la póliza no cubre al conductor si se encuentra bajo la influencia de bebidas alcohólicas.
Es decir, este conductor deberá hacer frente, por un lado, a una sanción administrativa y, por otro, a las posibles indemnizaciones que, por vía de repetición, le solicitará más tarde la aseguradora. Unas cantidades que pueden llegar a ser millonarias, en determinados casos.
El comparador de seguros también recuerda que existe otra posibilidad: verse inmerso en un accidente como peatón estando bajo los efectos del alcohol.
“Esta situación puede tener consecuencias terribles, sobre todo si se demuestra que hemos causado un accidente estando borrachos pongamos, por ejemplo, porque hemos cruzado indebidamente y hemos generado un siniestro con víctimas mortales”. Por no hablar de la multa si tenemos un poco más de “suerte”.
Por supuesto, también puede suceder que, precisamente por cometer una imprudencia como peatones yendo bebidos, nos convirtamos en las víctimas de este accidente de tráfico.
Por desgracia, este tipo de siniestros son cada vez más frecuentes y se saldan cada vez más con un número mayor de muertos. En concreto, el 46% de aquellos a quienes se practicó la autopsia, dio positivo.
Para terminar, el comparador indica que hay algunas aseguradoras que ofrecen pólizas (normalmente para jóvenes) con un servicio de asistencia nocturna que recoge al asegurado si está borracho. Opera entre las 00:00 y las 07:00 de la mañana y lo que hace es recogerle en taxi y llevar sucoche en grúa hasta el domicilio.