La Junta pide a los ciudadanos que se autoconfinen
El Gobierno de Castilla y León ha pedido a su población que actúe como si hubiera un toque de queda, una medida que el Ejecutivo autonómico decidió que no iba a volver a solicitar al Tribunal Superior de Justicia por el rechazo que expresó al respecto en anteriores ocasiones.
Colaboración con Centro de Recuperación de Memoria Democrática
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En la rueda de prensa semanal sobre la situación de la pandemia en la Comunidad, la consejera de Sanidad autonómica, Verónica Casado, ha catalogado de "explosión" los contagios de covid en esta quinta ola que "ya no solo están afectando a jóvenes", sino que ya se está trasladando a otros grupos de mayor edad.
Casado ha pedido a los ciudadanos que se “autoconfinen” mientras aprobaba medidas como el cierre de los parques por la noche, la prohibición del consumo de pie y el cierre de las discotecas.
“Les pedimos que adopten ustedes el toque de queda, que de 1 a 6 intenten evitar circular por lugares concurridos”, ha pedido Casado mientras Igea ha recordado que hay consenso en este asunto y que otras regiones como Aragón, Cataluña, Valencia o el País Vasco también quieren aplicarlo.
“Si hubiéramos podido mandar a la gente a casa a las 1:30 hubiera sido más eficaz”, ha reconocido Igea.
Preguntado por la petición del presidente del País Vasco, Íñigo Urkullu, de que vuelva la obligatoriedad de las mascarillas en exteriores, el vicepresidente y portavoz de la Junta, Franmcisco Igea, ha recalcado que la Junta de Castilla y León lleva "semanas" pidiéndolo.
Como ha explicado Casado, el toque de queda y el uso de las mascarillas son las dos medidas más eficaces que se pueden adoptar para frenar esta quinta ola, pero ambas "no dependen" del Gobierno autonómico, sino que una debe contar con un aval de la justicia que no se contempla en Castilla y León sin un marco como el estado de alarma y una segunda de las mascarillas que depende del Ejecutivo central. Tampoco se contempla en otras comunidades, como Navarra, donde el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad ha rechazado el toque de queda que iba a entrar en vigor esta misma madrugada.
En este sentido, desde la Junta de Castilla y León han apuntado a los "falsos mensajes de seguridad" que se han dado desde el Gobierno el motivo de esta quinta ola: "Hemos relajado a la población, hemos mentido al virus, hemos dicho que volvían las sonrisas...", ha lamentado Igea.
Nuevas restricciones en la hostelería
Desde ayer y durante 14 días se prohíbe el consumo en barra o de pie en los establecimientos hosteleros de Castilla y León, que restringen el aforo al 75 por ciento con un máximo de diez personas por mesa, y que adelantan el cierre media hora, a la una y media de la madrugada, entre otras medidas para controlar la quinta ola de la covid.
Un mes han durado las barras de los bares abiertas en la Comunidad, desde el pasado 18 de junio cuando los buenos datos tras pasar la cuarta ola llevaron a adoptar esa medida, que la quinta ola ha vuelto a tumbar
Igea se ha cuestionado si todavía hay gente que se pregunta por qué la evolución de la pandemia en España es la que es.
“Las medidas que se toman provocan lo que provocan”, ha señalado y lamentado mensajes equivocados en clara alusión al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez (“vuelven las sonrisas” o “hemos vencido al virus”).
Igea ha sido muy crítico “somos idiotas, tengo que admitirlo”, ha apuntado para lamentar que en España “hemos hecho la misma cosa 5 veces”.
El vicepresidente de la Junta se ha decantado por la estrategia de Italia, Alemania o Francia donde se toman medidas más duras y sus dirigentes dan mensajes más duros y medios optimistas.
“Somos idiotas” ha reiterado, recordando que España ha querido correr en múltiples ocasiones para “salvar la Navidad, la Semana Santa, el Verano...”
El vicepresidente ha realizado “autocrítica” señalando que la Junta también ha tomado medidas equivocadas y ha pedido que esa autocrítica se haga extensiva a otros gobiernos y también a sectores de la sociedad.
La situación en Castilla y León
Igea ha advertido que “vamos a vivir un incremento de las hospitalizaciones y la presión en el sistema esta semana y probablemente la próxima”, en Castilla y León.
Ahora mismo la región tiene una incidencia que ronda los 900 puntos, entre las más altas de España.
Actualmente Castilla y León tiene 415 pacientes ingresados, de los que 60 están en plantas de críticos.
En la región el 64 por ciento de la población está ya inmunizada, lo que supone ser la tercera comunidad de España y estar 6 puntos por encima de la media.
