La Comunidad pierde 21.718 empadronados aunque los pequeños pueblos resisten la emigración

Los pueblos de menos de cien vecinos han ganado un 0,43 por ciento de población entre el 1 de enero del 2016 y la misma fecha de 2017, hasta los 39.620 empadronados; y los de hasta el medio millar de habitantes anotaron un ligero repunte del 0,22 por ciento, hasta sumar 258.201 residentes, según los datos del INE.

También resisten el descenso demográfico el grupo de municipios de entre 2.000 y 5.000 habitantes, que pasan de 198.140 a 203.662 empadronados en el último año, que suponen un repunte de casi el 2,8 por ciento.

Hasta ahí lo positivo de los datos, ya que las capitales de la Comunidad perdieron 6.332 empadronados, el 0,61 por ciento; y la misma tónica se reprodujo en el resto de tramos de municipios por población.

Así sucede en el otro grupo de municipios que más población congregan en la Comunidad, los de entre 5.000 y 10.000, que pasan de 246.740 a 240.557 habitantes, un 2,51 por ciento de descenso.

Los municipios de entre 10.000 y 20.000 habitantes pierden algo más de 470 habitantes; los de hasta 50.000 casi 850; y los de hasta 100.000 más de 650.

La pérdida de empadronados se notó en 2016 tanto en la población española, con 2.303.523 residentes en la Comunidad, 15.363 menos, con una caída del 0,66 por ciento; como en la extranjera, con 122.278 empadronados, 6.355 menos, que suponen un descenso de casi cinco puntos.

La población extranjera empadronada en la Comunidad ha pasado de supone el 5,26 por ciento del total a 1 de enero del 2016 al 5,04 al 1 de enero del 2017.

Por grupos de edad, Castilla y León sólo gana empadronados en el de mayores de 65 años, que son 600.274, lo que supone 1.946 más; mientras que pierde 4.095 en el de hasta quince años, que se queda en 311.709 empadronados.

También se resiente el grupo de entre 16 y 64 años, el de edad laboral, que pierde 19.569 empadronados hasta 1.513.818.

La pérdida de habitantes en el padrón ha afectado a todas las provincias, con casos como el de Soria que baja de los 90.000 empadronados, y se queda con 88.903.

La provincia abulense pasa de 162.514 a 160.700 empadronados entre el 1 de enero del 2016 y la misma fecha del 2017; Burgos de 360.995 a 358.171; León de 473.604 a 468.316; Palencia de 164.644 a 163.390; Salamanca de 335.985 a 333.603; Segovia de 155.652 a 154.184; Valladolid de 523.679 a 521.130; y Zamora de 180.406 a 177.404.