Condenado a 13 años el joven que violó a mujer de avanzada edad

La Audiencia provincial de Soria ha condenado a 13 años de prisión y un día a A.A.A., de nacionalidad marroquí, por violar en la madrugada del 7 de febrero de 2017 a una mujer de avanzada edad, tras entrar en su vivienda, en una localidad soriana de la comarca de Tierras Altas.

La sentencia, facilitada hoy por el gabinete de comunicación del TSJCyL, condena a A.A.A. como autor responsable de un delito de agresión sexual y un delito de allanamiento de morada.
Además le condena a inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo por igual periodo y diez años de libertad vigilada.4
La sentencia también le condena con la prohibición de aproximación durante 23 años -a cumplir simultáneamente con la pena privativa de libertad y de libertad vigilada-, a menos de 500 metros, tanto de sus personas, domicilio, lugar de ocio, trabajo o cualquier otro lugar de uso frecuentado por las mismas, así como prohibición de comunicarse por cualquier medio o procedimiento, con los hijos de la mujer agredida, fallecida el pasado 14 de abril de 2018.
Igualmente, el procesado abonará las costas del procedimiento, incluidas las de la acusación particular.
Contra esta sentencia se puede interponer recurso de apelación ante la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León.
En concepto de responsabilidad civil, el condenado tendrá que indemnizar a los hijos de la mujer agredida, en la cantidad de 80.000 euros, más intereses legales.
El procesado se encuentra en la actualidad y desde auto de fecha
8 de febrero de 2017 en situación de prisión provisional.
El procesado ha reconocido haber realizado todos y cada uno de los hechos, en la secuencia descrita por el Ministerio Fiscal en su escrito de acusación.
La sentencia reconoce como probado que en la madrugada del 7 de febrero de 2017, el ya condenado entró en la vivienda de la mujer de 84 años, escalando la pared hasta llegar a su balcón, rompiendo los cristales del mismo y tapándose la cara con una braga de cuello, con ánimo de satisfacer sus "deseos libidinosos".
El condenado se dirigió al dormitorio donde se encontraba dormida la mujer, encendió la luz y le manifestó que venía "a violarte", hecho que consumó produciendo lesiones en los órganos genitales a la mujer violada.