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Un rincón para todos

El Rincón de Bécquer tendrá nuevo diseño a finales de año con más espacio para los peatones en una plaza dividida en cuatro zonas

El Rincón de Bécquer será más de todos a la vuelta de unos meses. Un concurso de ideas, promovido por el Ayuntamiento, mejorará el uso público de este entorno urbano. Las ruinas del antiguo convento de San Francisco ganarán protagonismo, sobre todo por la noche.

Es una más de las actuaciones de recuperación de entornos urbanos que el equipo socialista de Gobierno ha emprendido en esta legislatura, de la mano de la financiación extraordinaria -por imprevista- del Fondo Estatal para el Empleo y la Sostenibilidad. La remodelación será ejecutada por la unión temporal Construcciones Velilla y Seranco, por algo más de 600.000 euros. Para finales de año, se prevé que sea una realidad el nuevo Rincón de Bécquer.
Dejará atrás un espacio diseñado y financiado en la década de los sesenta por el propio Ayuntamiento capitalino, según proyecto del entonces arquitecto municipal Guillermo Cabrerizo y que es simultáneo al paseo del Espolón, otro espacio peatonal que se remodelará cuando la Junta firme su compromiso de financiación del nuevo tratamiento en superficie.

san francisco
El nuevo espacio urbano resaltará las ruinas del antiguo convento de San Francisco, ocultadas durante años por un arbolado que no ha tenido, sin duda, el suficiente mantenimiento. En su lugar, según explica uno de los arquitectos del proyecto, Bernardo del Pino, se pondrá una vegetación de porte bajo, con especies olorosas (tomillo, manzanilla, menta). Se trata, según sus palabras, de trasladar el campo de Soria a la ciudad. La otra intervención de zona verde se realizará en el borde perimetral que limita con la calle Duques de Soria. Se eliminarán los actuales aparcamientos y se colocarán lomas vegetales de gran tamaño, para evitar el rudio del tráfico rodado.

ÁREA PEATONAL
Entre las dos zonas verdes se extenderá el área peatonal. El tratamiento será con hormigón texturizado, al que se aplicará una ligera pendiente -lejos de las actuales escaleras y muretes- en una dirección, según el recorrido de la plaza.  Esta zona estará limitada por bancos de hormigón y dividida en cuatro zonas: la primera, para ubicar una terraza junto al bar existente; la segunda, una fuente conmemorativa dedicada a Gustavo Adolfo Bécquer; la tercera, una fuente de chorros desde el suelo, como las que proliferán en otras ciudades; y la última, en la zona más soleada, un área infantil. Un entorno urbano que ganará funcionalidad para todos.

 

Luz desde el suelo para realzar las ruinas de San Francisco

LAS RUINAS DEL ANTIGUO convento de San Francisco, el monumento situado más al oeste de la ciudad, son una de las protagonistas de esta remodelación. Ganan sin duda protagonismo en este espacio urbano, después de años ocultadas tras una masa arbórea que diferentes corporaciones se olvidaron de mantener. En la anterior legislatura, la entonces alcaldesa Encarnación Redondo planteó en alguna ocasión la necesidad de despejar esta zona y resaltar el conjunto patrimonial pero la iniciativa se quedo en idea. El arquitecto Ignacio Cabrerizo, que formó parte del jurado del concurso de ideas que seleccionó el proyecto ganador, destaca que la plaza será de noche más bonita, merced a la iluminación que se empleará. El proyecto contempla colocar unos soportes empotrados en el suelo, con focos de bajo consumo, para resaltar las ruinas. Además, una serie de LED empotrados en el suelo, de bajo consumo, marcarán los recorridos de mayor tránsito peatonal en la nueva plaza. Los bancos de hormigón también dispondrán de iluminación del mismo tipo.