Las claves del liderazgo del Numantino entre museos provinciales
La directora del Museo Numantino, Marian Arlegui, ha expresado su satisfacción por liderar el Museo Numantino y sus anexos el ranking de visitas de todos los museos provinciales de la región y ha mostrado su confianza en que seguirán aumentando en los próximos años, donde ha emplazado a afrontar retos para mejorar su conocimiento.
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Arlegui ha subrayado que han recuperado las cifras anteriores a la pandemia y si se tuviesen en cuenta que no están incluidos en el registro oficial los visitantes al yacimiento de Tiermes, que no tiene sistema de control de acceso, “seguro que sobrepasaríamos los 200.000 visitantes” entre todos los centros.
En 2023, el Museo Numantino, “uno de los mejores museos en colecciones de la céltica europea”. recibió a 24.255; San Juan de Duero “uno de los monumentos más visitados de toda Castilla y León”, 79.709; el yacimiento de Numancia, 38.716; la ermita de San Baudelio, 22.397; el museo de Ambrona, 4.478; y el museo de Tiermes, 5.160, a lo que habría que sumar los visitantes al yacimiento, por no existir registro.
Arlegui ha subrayado que estrictamente el Museo Numantino está por encima en visitas de la mayoría de museos provinciales, salvo Burgos, León y Ávila, que se benefician de la mayor población de sus ciudades, de ser puntos de paso del Camino de Santiago y de estar próxima a Madrid.
“No sólo nos hemos recuperado, sino que hay una tendencia al alza. Resaltaría San Baudelio, que está subiendo de una manera progresiva y continuada, año y año”, ha subrayado.
Arlegui ha explicado que este crecimiento se debe a que la ermita está siendo cada día más conocida, merced a la publicidad institucional y a la propia promoción de los medios de comunicación y el propio “boca a boca”.
“Cuando se conocen ya los espacios más tópicos, hay personas que buscan lugares más específicos. Y hay que añadir que hubo que imponer una visita de ocho personas, por cuestiones de conservación, que beneficia la calidad de la propia visita y pese a eso sigue creciendo”, ha resaltado.
Concentración
Todas las cifras de visitas tienen una concentración “elevadísima” entre los meses de mayo a septiembre u octubre, aunque de esta tónica hay que exceptuar al propio Museo Numantino, que tiene visitas más regulares, en gran parte al departamento de Educación y Acción Cultural, que organiza actividades para los públicos infantiles, tanto en periodo escolar como no lectivo, “y nos gratifica especialmente porque los sorianos tendrán como referencia un espacio público que nos pertenece a todos, por ser nuestra memoria colectiva”.
El número de visitantes no es la mejor cifra en el histórico, ya que en el año de las Edades del Hombre en Soria, en 2009, se multiplicaron las visitas en San Juan de Duero.
Arlegui ha señalado que han comprobado que con exposiciones temporales de envergadura las visitas suben y tienen una rentabilidad social, por ser llamadas de atención, pero el patrimonio cultural actúa “como una piedra en un estanque”, por lo que, a su juicio, es importante fidelizar las visitas entre los sorianos.
“Me gustaría aumentar más que el número de visitantes, el de usuarios. El de sorianos que visitan con más regularidad el museo. Es una tendencia cada vez más al alza. Y tenemos el reto de modernizar todas las instalaciones para ser competitivos de cara a otras provincias y lugares”, ha emplazado.
En concreto, Arlegui cita el caso del museo de Ambrona, que el propio consejero de Cultura ha señalado que necesita inversión para su mejora.
Retos
En 2024 se quiere abordar la reforma museográfica de Tiermes, con lo que el museo será el puente de acceso al yacimiento así como la reforma del Numantino, “que ha envejecido muy bien pero necesita ya una actualización en todos los sentidos”.
Arlegui ha avanzado el interés de incorporar nuevas piezas a la colección museográfica pero para ello hay que actualizar el discurso narrativo. Y ad4emás hay que incorporar las nuevas tecnologías, “que no sean excluyentes”.
Un proyecto en la agenda es la adecuación del Museo Numantino a determinados grados de minusvalías. Ahora mismo es accesible físicamente pero falta el colectivo invidente o con dificultades visuales.
La tendencia según Arlegui es que las cifras de visitantes sigan subiendo en los próximos años en el Museo Numantino y sus centros.
A su juicio, el excesivo calor del pasado verano llevó a muchas personas a elegir la playa y huir de la España interior, con lo que el incremento de visitantes podría haber sido mayor.
“Desde la pandemia, una vez superada las fases tan terribles iniciales, observamos un incremento del turismo de interior, quizá por la prudencia y la cautela. Hay un perfil que me resulta llamativo: hay grupos de personas recientemente jubiladas, que forman parte de una generación que en su juventud tuvieron muchas preocupaciones culturales. Fue una generación especialmente comprometida, porque su madurez coincidió con la transición,y ahora en jubilación, visitan con verdadero interés monumentos, yacimientos y museos”, ha explicado.
Dos realidades
Arlegui ha manifestado que hay dos realidades bien distintas en los visitantes del Museo Numantino: los locales y los turistas, que necesitan cada uno de ellos actividades diferentes.
Madrileños, valencianos, catalanes, vascos y castellano-leoneses son fundamentalmente el grueso de los visitantes.
En 2018 y 2019, el yacimiento de Numancia rozó las 50.000 visitas y, tras la pandemia, ha recuperado visitas hasta alcanzar este último los 38.716 visitantes.
Numancia ha generado una plataforma muy interesante y consolidada, en torno a la memoria del mito y su historia.
“Ahora es el momento de hacer un proyecto ambicioso para Numancia, que aúne la historia y el mito, porque lo merece”, ha emplazado Arlegui, licenciada en Prehistoria por la Universidad Complutense de Madrid con el tema de tesis “Las cerámicas monocromas de Numancia”.
