Marta Pérez: "Llego a los Juegos Olímpicos de París en forma"
La atleta soriana Marta Pérez, a sus 31 años, encara en París los que serán sus segundos Juegos Olímpicos tras su gran papel en Tokio en los 1.500 metros. Lo hace preparada, con la vista puesta en la primera eliminatoria, pero con ambición.
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Pérez estuvo cerca de conseguir un valioso diploma en la final de los 1.500 metros de los Juegos Olímpicos de Tokio, donde acabó en la novena posición y con nueva mejor marca personal (4:00.12), Estos días, hasta coger el puente aéreo con dirección a París, ultima en Soria su preparación. Con ella hemos hablado
Habrá escuchado más de una vez que París bien vale una misa ¿Para usted cuánto vale París?
- Es una competición especial. Son unos Juegos Olímpicos que a nivel mediático y social y de la gente que me rodea son muy importantes. Además los voy a compartir con Irene (Sánchez Escribano, atleta toledana que estará en París en los 3.000 metros obstáculos, tras no poder acudir a Tokio por una lesión), que es algo especial para mi. Pero dentro de todo esto, los Juegos Olímpicos de París son una parte de mi carrera deportiva. Estoy muy orgullosa de llevar muchos años yendo a los campeonatos internacionales, pero estoy tan orgullosa de haber llegado a París como lo estuve el año pasado de llegar a Budapest al Mundial. Es una parte más de mi carrera deportiva.
inal de los 3.000 metros obstáculos
- Es su segunda participación en una olimpiada después de Tokio, donde cuajó un gran papel, siendo novena en la final, y a centesímas de bajar de los cuatro minutos. ¿Toda una bomba?
- SÍ, porque nadie se esperaba nada de mi. Una bomba porque el tipo de atleta que llegó a Tokio no es la que llega ahora a París. Tokio fue una bomba ya el hecho de pasar a la semifinal. Seguramente en Paris optar a la semifinal se vea como normal.
- Se quedó en Tokio con la espinita de no bajar de los cuatro minutos?
- Sí. Pero he hecho 4.00. otras veces, como el año pasado. Pero el año pasado, como no eran los juegos, no se enteró nadie.
- Con qué expectativa viaja a Paris? ¿Simplemente a disfrutar?
- No, yo disfruto compitiendo bien. Ni desde pequeña he dicho que voy a una competición a disfrutar. Lo que sí que digo es que voy a marcarme los objetivos uno a uno. El 1.500 femenino tiene un nivel impresionante. Se acaba de hacer el récord del mundo en Mónaco. La gente está corriendo en tres minutos y cincuenta y pocos segundos…. Sé que la final es carísima, incluso pasar por la eliminatoria. Voy a salir a la eliminatoria como si fuera una final para mi e intentar quedarme entre las seis primeras que son las que clasifican para la semifinal. Y para mi ahora mismo es el objetivo más importante. Cuando esté en la semifinal, si estoy, me plantearé lo siguiente. Mi objetivo es correr la eliminatoria tan rápido la última vuelta como para estar en las semifinales como poder volver a correr otra ronda. Hay que disfrutar de la experiencia, pero disfruto cuando compito bien.
- Ha tenido hace unas semanas una lesión muscular que ha superado ¿es más difícil gestionar el cuerpo o la mente?
´La cabeza. El cuerpo te puede parar. A Irene en Tokio le paró el cuerpo y punto. La gestión muchas veces es más complicada de cabeza, porque no es una cuestión de lo que te haya parado la lesión, porque a veces tienes que ver como seguir entrenando y manteniendo la forma. Y después como gestionas las propias sensaciones en carrera. Y la confianza que hayas podido encontrar y volver a encontrar a ti mismo en la pista. Todo eso es de cabeza. Y otras veces no es cuestión de cabeza sino del propio sistema nervioso. A veces se queda un dolor residual o una sensación rara en una pierna y con eso tiene que aprender a mantener la confianza y competir igual de bien que si no te hubiera pasado nada.
- Hasta que punto sabe usted sufrir en la pista?
- Soy muy sufrida, pero también muy autoexigente e inconformista conmigo misma. Es necesario ser sufrida, soy muy trabajadora y disciplinada pero también soy muy inconformista y a veces yo a mi misma me trató regular. Y gestionar estas situaciones es complicado.
- Una de las imágenes que más gusta al aficionado al atletismo es ver la buena relación que mantiene con Esther Guerrero, su principal competencia en España en el 1.500. ¿La rivalidad es tan sana como parece?
- Sí, siempre lo digo. Tengo muy mal perder conmigo misma, me cuesta mucho asumir cuando he hecho algo mal, pero no tengo nada de malperder con las demás atletas. Soy supercompetitiva, pero tengo buen perder. Soy buena compañera en ese sentido. Con Esther me llevó realmente bien y cuando me gana, me ha ganado. Y además compartimos un montón de veces habitación, campeonatos internacionales, ayer hablé con ella por el wasap… Es una persona que tengo contacto, no es nada falso.
- Cuando decidió probar en el atletismo de alta competición, tras terminar los estudios de medicina, aseguró, en una entrevista realizada en 2015, que su vista estaba puesta en unas olimpiadas. ¿Va a por la segunda?
- Acabe la medicina en 2017 y tenía en mente Tokio, los siguientes Juegos Olímpicos. En mi cabeza durante mucho tiempo era llegar hasta Tokio y decidir si seguía en el atletismo profesional. Cuando llegó, tenía clarísimo que no lo iba a dejar. Me di cuenta que había madurado siendo atleta y que disfrutaba mucho. Realmente que he llegado a un equilibrio que me permite tener una vida personal que me gusta, teniendo este trabajo.
- Tiene 31 años y le daría, en teoría, para intentar llegar a otros juegos olímpicos…
- Sí, pero nunca sabes lo que te queda. Ahora mismo no sé contestar a la gente porque no he tomado esa decisión. He tomado la decisión de que después de París no lo voy a dejar. Lo tengo claro. Aunque durante la temporada no todas las épocas son iguales. Hay momentos con más motivación y con menos y momentos a nivel social más duros… Cuando compites es mucho más duro mantener tu rutina pero luego compites, te merece la pena todo.
- Aunque no consiga objetivos?
- En Munich no me salió bien el Europeo pero me sigue compensando, porque al final sabes que estás en ese nivel y esa carrera, o no te ha salido, o te han ganado. Si ahora mismo estuviese haciendo 4:20 y no fuese a los campeonatos internacionales, probablemente que dejaría de compensar. Soy consciente de que mi motivación sigue, porque mantengo el nivel. En este Europeo quede muy bien, sexta, pero si hubiese quedado décima, me seguiría compensando.
Desde que se dedica profesionalmente al atletismo hasta ahora, que destacaría)
- Cuando estudiaba, mi primera vez internacional fui en quinto, con el Europeo de Amsterdam, en 2016. Tenía 23 años. Y en sexto de Medicina, fue la primera vez que fui a un Mundial, al de Londres, e hice 4:06 y 4.04. Probablemente si no hubiese ido ni a Amsterdam ni Londres, hubiese sido médico y punto. En 2018, que fue el primer año que no estudie, hice marca personal en 3.000, en 800, en 1.500. Y desde entonces he ido a todos los internacionales.
- ¿Tiene más brillo una medalla o una marca?
- Una medalla, sin duda. No sé si tanta gente se acuerda de la marca que tiene Fermín Cacho en 1.500. Se acuerda de que fue campeón olímpico.
- Se ve con capacidad de correr en 3:50, récord femenino?
- De ese tiempo no, pero cuatro minutos sí. Y creo que puedo bajar de cuatro minutos. Es verdad que no vale decir las cosas si no las haces, pero me refiero a que no es una barrera que no crea que no puedo pasar. Muchas veces sucede en carreras que son perfectas, en oportunidades perfectas y a veces no se da. En Tokio hice 4.00.12, pero después de otras dos carreras en las piernas. Y sin embargo volví a repetir el año pasado el tiempo en Bruselas en una carrera donde podía haber corrido más pero no me dieron las piernas. Llego a los Juegos en forma, he trabajado toda la temporada, y pensando que estoy en forma para bajar de esa marca y enfrentarme a las rivales.