Sube al bus
Con buena nota
Una puerta al mundo
Soria fue la última capital española en implantar un servicio municipal de transporte urbano. Tres años después de su puesta en marcha, la experiencia, avalada por las cifras de utilización, pone de manifiesto que es un servicio utilizado pero que necesita más usuarios para alcanzar los objetivos. Los grupos políticos dan vueltas a las posibles novedades.
El Ayuntamiento de Soria estudia estos días una modificación del transporte urbano de la ciudad, tras denunciar la empresa adjudicataria Urbanos de Soria (grupo Avanza) que la concesión es claramente deficitaria sobre el equilibrio económico establecido.
Un servicio deseado
Un transporte que responde a la demanda social
Todos los grupos políticos municipales defienden la continuidad del servicio de transporte urbano por la vocación social del mismo, en sintonía con las asociaciones de vecinos de la ciudad. Su presidente Ignacio Gutiérrez, resalta que el déficit de la concesión (211.200 euros por debajo de las previsiones municipales en la recaudación de 2009) no se debe mirar sólo por su rentabilidad económica sino que debe considerar su beneficio social. Anima a sentarse en una mesa y estudiar las modificaciones para que el servicio llegue a todos los puntos, ya que lo pagan todos los ciudadanos. Es un criterio que comparte, por ejemplo, el Partido Popular. María Victoria Hernández Candeal, admite modificaciones en el servicio siempre y cuando no se quede ninguna zona de la ciudad sin cubrir.
El equipo socialista de Gobierno trabaja en una fórmula intermedia que consiste en ajustar los kilómetros y poner más dinero para la concesión.
Cambios futuros
Aumento de frecuencias y zonas
La demanda potencial está en la línea de los hospitales y la de la barriada y el polígono. Javier Antón, concejal de Servicios Locales, estima que aumentando la frecuencia del transporte, a determinadas horas, se podría incrementar el número de viajeros. Por contra, apuesta por reducir el servicio donde no hay demanda y, sobre todo, los fines de semana. El transporte urbano, en sus tres años de servicio en Soria, ha demostrado que no es utilizado por motivos de ocio.
La propuesta que se pondrá sobre la mesa es integrar la línea 4, que da servicio a los barrios de San Pedro y El Calaverón, en las líneas 1 -El Calaverón- y las 2 y 3 -San Pedro-. La red pasaría de cuatro a tres líneas. Ello permitiría incorporar nuevas zonas urbanísticas al servicio como el cerro de los Moros y mejorar las frecuencias de paso de los autobuses en determinadas franjas horarias. En la modificación tampoco descarta, si los grupos políticos insisten, suprimir -como ha pedido IDES- las dos paradas autorizas a la línea de Las Camaretas.
Aceptación, kilometraje, usuarios, preferencias
550.000
viajeros han utilizado durante 2009 el transporte urbano de la ciudad. La tendencia, según la memoria anual presentada por la empresa Urbanos de Soria al Ayuntamiento capitalino, es que se mantenga, a pesar de la crisis económica, lo que, a su juicio refleja la buena aceptación que ha tenido la implantación del servicio. Desde mayo de 2007, suma 1.600.000 usuarios.
18,9
kilómetros (ida y vuelta) es la longitud de la red básica del transporte (líneas 1 a 4). El número de paradas es de 65, distribuidas en 45 postes, de los que siete estaban dotados de marquesinas. La distancia media entre paradas es de 315 metros. Los 5 autobuses en servicio en días laborables realizan 180 viajes diarios (ida y vuelta), con un promedio de 789 kms/día por línea.
2.458
usuarios son los que se registraron el 17 de diciembre de 2009, la jornada en la que los sorianos utilizaron más el transporte urbano durante todo el año debido a las adversas condiciones meteorológicas (nevadas, frío, etc.). Octubre fue el mes con más viajeros (48.797 usuarios), aunque noviembre es el mes con mayor uso del servicio en día laborable, como sucedió ya en 2007 y 2008.
227.894
tarjeta bus son las empleadas por los usuarios del transporte durante 2009, lo que supone el 41,6 por ciento del total de viajeros transportados (548.134). El billete sencillo fue utilizado por 176.576 viajeros (32,2 por ciento). El aumento del uso de la tarjeta bus conlleva un incremento de la utilización del transbordo (un viaje gratuito en 45 minutos).