Regalan un mundo mejor
Viviendo por debajo de cero grados
La mitad del salario, para comprar casa
Ni un niño sin juguetes en navidad
Me lo pido es la frase que más escuchan estos días los padres de sus hijos. Jugar no es un privilegio. Por ello, Cruz Roja Juventud ha llevado un año más la ilusión a los niños más necesitados de la provincia.
La campaña de Cruz Roja Juventud llegó a Soria hace catorce años. Diputación provincial, Junta de Castilla y León y Ayuntamiento de Soria e hipermercado Leclerc colaboran hoy en esta iniciativa que quiere evitar que ningún niño de la provincia se quede sin su juguete. Además hay donaciones de gente anónima, que se acerca hasta la sede de Cruz Roja para donar un juguete nuevo. Este año, otro apoyo ha sido el sorteo de Navidad de la Banda de Música.
En total, Cruz Roja lleva la ilusión a doscientos niños, pertenecientes a cincuenta familias de la capital y sesenta de la provincia. Intentamos que no sean ni bélicos ni sexistas, asegura Lorena Pacheco, delegada de Cruz Roja Juventud.
Es importante, decisivo, acertar con el regalo. Hay niños que te piden e intentamos comprar lo que piden, apunta Ana Alegre, técnica de Cruz Roja.
compromiso
Otros años, Cruz Roja cambiaba la entrada del concierto de Navidad por un juguete nuevo. Lo que hacíamos otros años es que con el juguete el niño fuera capaz de dar un regalo él, recuerda.
Hasta los 13 años, hay juguetes para todos. A través de los CEAS, Cruz Roja ha seleccionado a quien verdaderamente lo necesita. Si que nos hemos encontrado en algún colegio, donde hacemos concienciación de lo injusto que es el mundo, que hay niños que se acuerdan que les dimos nosotros el juguete, recuerda. Es una de las campañas que más me gusta, porque es de las que más voluntarios mueve, insiste. Sólo envolviendo los regalos, una treintena de personas.
UN BUEN JUGUETE
Para acertar con un buen juguete que se va a regalar a otro niño es imprescindible cumplir cuatro premisas La primera, que el jueguo sea nuevo, a poder ser. Que sea nuevo y actual repercute en la bondad del regalo en la medida en que no hay distinciones ni categorías. en segundo lugar, el juguete debe ser educativo; debe potenciar las capacidades del niño. Educativo no significa aburrido. Cada vez hay más juguetes adecuados y atractivos, sin necesidad de elegir aquellos en los que la violencia explícita o implícita despierta el interés del niño. los juguetes tienen que ser no sexistas. Es necesario dejar atrás el tópico de regalar juegos femeninos a las niñas y masculinos a los niños. Es un error pedagógico: si a los niños/as se les impide potenciar parte de sus habilidades, se estará limitando al hombre y a la mujer de mañana. POR ÚLTIMO, el juguete no tiene que ser eléctrico. Hay que evitar comprar aquellos juguetes que necesiten de otro elemento para ser utilizados o completos. Si se rompen o se acaban las pilas, adiós al juguete.