entrevista de cerca Antonio Pardo CapillaPRESIDENTE DE LA DIPUTACIÓN PROVINCIAL
Antonio Pardo, presidente de la Diputación provincial, sueña con darle una vuelta a la provincia. Su situación, señala, es de emergencia. Compromete decisiones.
Lleva un mes metido en harina en la máxima responsabilidad de una casa que conoce. Todos los departamentos tienen ya deberes, con el común objetivo de cambiar la dinámica económica de la provincia.
La Diputación ¿es necesaria? -Es necesaria y más en el mundo rural, para atender a los ayuntamientos. Y para más cosas que nos puedan plantear las competencias que esperamos que algún día se cierren y delimiten definitivamente.
La actual estructura administrativa de la provincia ¿se puede mantener? -Es muy complicado. Hay que ordenar el territorio. La propia Junta de Castilla y León ya está remitiendo indicaciones al respecto. La provincia de Soria tendrá que ponerse a trabajar en ese ámbito. En las últimas elecciones municipales, ha habido municipios que no podían ni constituir las propias mesas electorales. Es una prueba evidente de las dificultades poblacionales y hay que darle una vuelta.
-¿Cuál es la alternativa? - Hay que tender a una zonificación y establecer unos puntos con mayor capacidad de desarrollo, pero sin plantear ninguna eliminación de pueblos. Más que el ámbito de agrupación voluntaria, tendrá que haber unas propuestas, estudios y sugerencias que, con el mayor consenso posible, ofrezca la fórmula y la figura administrativa.
-¿Qué hará para caminar de la mano con el Ayuntamiento en algunos proyectos? -Son las dos instituciones más importantes en el ámbito local de la provincia y creo que debe haber una estrecha, correcta y cordial relación.
-La despoblación es el problema ¿No es exagerado decir que estamos en una situación de emergencia provincial? - No. En la provincia no se toman decisiones por el miedo al qué dirán. Hay que tomar soluciones. Y la Diputación tiene que capitanear determinadas cuestiones necesarias. Mi sueño sería juntar a los dos responsables de los gobiernos central y autonómico con una propuesta seria y profunda para el desarrollo provincial, que incluiría medidas fiscales e infraestructuras. Los planes que hemos tenido no han válido para mucho en la provincia. Pero también digo que dependemos mucho de lo que hagamos por nosotros mismos. Los ayuntamientos también tienen que tirar del carro, tienen que proponer ideas para mantener la provincia.
-¿Y en que plazos? - En ese acuerdo que sueño planteó un horizonte de ocho o diez años, con un compromiso de las cosas que tiene que hacer cada uno, y la propia Diputación. En materia fiscal, hay que facilitar a las empresas que tengan un escenario más atractivo para instalarse en la provincia. Es el reto que tenemos todos.
de perfil
Experiencia municipalista
Asegura que los políticos son aves de paso en las instituciones que dirigen y que lo que deben buscar es hacer bien las cosas y de manera honrada. Con ese propósito ha abierto una nueva etapa en la Diputación provincial, institución que conoce desde 1995 en la que se incorporó como diputado, tras ser elegido por primera vez alcalde de su Burgo de Osma natal, con apenas 34 años, y donde acaba de revalidar su mayoría absoluta por quinta vez consecutiva. Casado y padre de dos hijos, curtido en la empresa privada, Pardo es el octavo presidente del Ayuntamiento de Ayuntamientos en la democracia.