"El Encuentro" concentra la atracción en el Martes Santo en Soria
Procesiones de las cofradías de la Oración en el Huerto y la de la Flagelación del Señor
"El Encuentro" de las procesiones de las cofradía de la Oración en el Huerto y la de la Flagelación del Señor, en la remodelada plaza de Mariano Granados, ha acaparado hoy la atención en la Semana Santa soriana.
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La cofradía de la Oración en el Huerto y la de la Flagelación del Señor han iniciado a las nueve de la noche su procesión particular, cada una desde su templo, para juntarse ambas en la plaza de Mariano Granados y desde allí encaminar sus pasos, en un mismo cortejo, en dirección a la concatedral de San Pedro, donde han quedado sus pasos en custodia hasta la procesión del Viernes Santo.
Desde la iglesia de Nuestra Señora del Carmen, próxima al convento que fundara en 1581 Santa Teresa de Jesús, ha salido en procesión la cofradía de la Oración en el Huerto, subiendo al paso marcado por los tambores y cornetas hasta la plaza Mariano Granados.
En este entorno peatonal le estaba esperando la cofradía de la Flagelación del Señor, para marchar juntas hasta la concatedral de San Pedro.
La cofradía, cuyo hábito es el más llamativo por sus colores granate, dorado y verde, alumbra el paso de La Oración del Huerto, adquirido por la cofradía del Santo Entierro de Cristo y que participaba en la procesión de Viernes Santo.
La cofradía, cuyo origen es el mismo que el de esta procesión; solicitó en 1951 este paso a la cofradía del Santo Entierro, para celebrar una procesión la noche de Martes Santo. El paso, cuyas tallas siguen los patrones de la imaginería de Salzillo, va montado sobre un bello carro en madera de color verde y dorada, cubierto por faldón de terciopelo rojo con el emblema de la cofradía bordado. Representa a Cristo orante, arrodillado, en el Huerto de los Olivos; vestido con una túnica de terciopelo morado ceñida a la cintura por un cíngulo dorado acabado en borlas. A su derecha, un ángel le reconforta, vestido con una túnica blanca atada a la cintura por un fajín azul claro; y le muestra un cáliz plateado, recordando las palabras de Cristo pase de mí este cáliz.
El detalle más especial es una palmera natural, que todos los años es traída por la cofradía desde Elche, acompañada de los dátiles naturales.
A la misma hora ha salido desde la iglesia de Nuestra Señora del Espino, su sede canónica, la cofradía de la Flagelación del Señor, portando los pasos de Jesús atado a la Columna (siglo XVI) y el de La Flagelación (Escuela de Olot, 1951).
La procesión de la Flagelación salió a las calles de Soria por primera vez el año de 1954, año en el que se constituye canónicamente la cofradía; adjudicándosele la noche del Martes Santo. Desde hace algunas décadas comparte la noche de Martes Santo con la Cofradía de la Oración en el Huerto.
Dos pasos
La cofradía saca en procesión dos pasos, que representan la escena de la Flagelación de Cristo. El primero de ellos, la imagen de Jesús atado a la Columna (Escuela castellana, siglo XVI), muestra a Cristo abrazando la columna; a la que está atado con una cuerda que también le rodea el cuello, en la cual será azotado y flagelado. La imagen, de la escuela castellana de mediano tamaño, es portada a hombros por cofrades de la Flagelación sobre un trono de madera de un color oscuro, adornado con flores y faldón rojo.
El segundo, La Flagelación (Escuela de Olot, 1951), se monta sobre un sencillo carro de madera tallada con faldón rojo. Muestra la imagen de Cristo atado a la columna mientras un sayón levanta el flagelo ante la mirada impasible de un soldado romano. Adornado con múltiples flores, rematan las esquinas del paso cuatro faroles.
Via crucis penitencial de la cofradía de la Flagelación del Señor
