Procesiones en el Viernes Santo soriano
La Semana Santa 2023 está repleta de procesiones en la provincia. El Viernes Santo sonarán de nuevo los tambores y las trompetas para acompañar a la devoción de la tradición. Desde Molinos de Duero a Alcoba de la Torre, le ofrecemos una guía para elegir qué pasos seguir.
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Vía Crucis viviente de Molinos de Duero
A lo largo del paseo del Santo Cristo, a partir de las seis de la tarde del Viernes Santo se puede descubrir un espacio natural recuperado por la tradición. Consta de 14 cruces de piedra bien tallada de estilo neoclásico que a modo de paseo recorren la ribera por donde transcurren las aguas del incipiente río Duero. En los últimos años se ha recuperado a modo de auto sacramental, donde se refiere la pasión de Cristo con un sentimiento de peregrinación que consigue cada tarde del Viernes Santo enlazar la liturgia de La Iglesia con las costumbres y tradiciones locales.
La Carrera de Alcoba de la Torre
En Alcoba de la Torre, vecinos e hijos del pueblo se encargan de dar vida a la Pasión de Cristo desde el apresamiento en el Monte de Los Olivos, hasta la crucifixión.
Una treintena de personas escenifican dramáticamente, durante más de una hora, La Carrera o Pasión de Cristo desde la Oración en el Huerto hasta el Descendimiento de la Cruz, recorriendo las calles, entornos del pueblo y del castillo. Está considerada como la más importante escenificación soriana.
San Esteban de Gormaz
La cofradía de la Vera Cruz se fundó en 1554, por lo que es la más antigua de Soria, e impuso al obispo la procesión del Viernes Santo en 1624. Los siete cofrades almuerzan bacalao en el salón parroquial.
Por el mediodía: Vía Crucis de los Quintos; por la noche: procesión del Santo Entierro dirigida protocolariamente por los cofrades y en la que los apóstoles son doce niños con luminarias y donde los cuatro sanestebeños que llevan la Cama de Cristo se cubren con capa negra. A su término, hay convite en el salón parroquial para el pueblo.
Agreda
Los actos del Viernes Santo de Agreda fueron declarados de Interés Turístico Regional por la Junta de Castilla y León el día 19 de diciembre del año 2000. Es curioso el recorrido que se hace en la mañana del Viernes Santo, y parte del mismo por la tarde. Primero se va a buscar a los mayordomos o hermanos entrantes (si los hay), después al vicepresidente, a continuación al presidente y acto seguido al predicador. Sale después la procesión para el Sermón de las Siete Palabras. Terminada ésta se va a buscar a las autoridades civiles y militares para asistir todos al sermón. Al final del mismo el Ayuntamiento invita a la Cofradía a un vino de honor.
El presidente de la hermandad, con las galas que lo acreditan, ocupa ese día el puesto inmediato al del Sr. alcalde de la Villa en todos los actos públicos.
Por la tarde, al acabar la procesión general del Santo Entierro, que se celebra con gran solemnidad, en la que intervienen doce “Pasos”, algunos de gran valor artístico (siglo XVI) y en la que desde hace unos años se realiza “El Encuentro”, se lleva a cabo “el gasto”, en el que el presidente invita a las autoridades, hermanos, otros familiares y amigos a limonada (similar a la sangría).
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En Almarza,las hogueras iluminan la procesión de tres pasos.
En Dévanos, las velas de la procesión son encendidas con el fuego con el que se quema al «Hombre Viejo».
En Fuentelmonge, una procesión de veinte pasos, llega hasta el cementerio, donde el sepulcro es tapado con una túnica negra.
En Medinaceli se comienza con el Vía Crucis al mediodía, terminando con el Sermón de la Soledad y Procesión del Santo Entierro desde la Colegiata por la Plaza Mayor y la calles de la Villa.
En Almazán, la procesión del Santo Entierro sale desde la iglesia del Campanario tras subasta de los banzos. Una parada emotiva tiene lugar ante el convento de las clarisas, a cuya iglesia entran costaleros, banda de cornetas y tambores así como autoridades para escuchar el cántico de las monjas a Jesús Nazareno. Los niños calvaristas y el Niño de la Campanilla cantan El Calvario mientras otros representan a personajes bíblicos.
En Arcos de Jalón, en la Procesión del Silencio, participan las Manolas, jóvenes enlutadas y con peineta, a la par que algunos arcobrigenses van descalzos junto a la Dolorosa.
En Covaleda, Se desciende de la cruz al Cristo articulado del siglo XVII y se le pone en el sepulcro, iniciándose la procesión a continuación, con algunos pies descalzos con cadenas.
En Langa de Duero, una treintena de personas escenifican la Pasión por las calles a lo largo de dos horas, concluyendo con la Salve en la parroquial.
En Ólvega, en la placeta de Moncayo, a mitad de la procesión, tiene lugar el sellado del Santo Sepulcro por el capitán de los romanos. Al término de las procesiones olvegueñas, las mayordomas llevan peineta y mantilla, y se reparte limonada a los penitentes de la Vera Cruz y a los romanos al término de la procesión.
En Pedrajas, tras el Vía Crucis se reparten bocadillos de sardinas, limonada y refrescos. El calvario pétreo es de 1787.
En Retortillo de Soria, jóvenes y niños escenifican cada estación del Vía Crucis en diversos enclaves del pueblo.
En San Leonardo, en la Procesión de la Carrera, hombres y mujeres cantan poemas que la tradición ha atribuido a Lope de Vega, ellos cantan El Reloj y Los Naipes, y las mujeres, corean junto a las Niñas del Cristo el de La Pasión.
En Talveila, todos los varones mayores de dieciocho años comparten una cena bendecida por el párroco y se bebe en tazas de plata.
En San Pedro Manrique, desfilan dos pasos, con penitente encadenado portando la cruz, y hay entrecruzamiento de dos espadas antes y después de la procesión; en este pueblo se degustan las colaciones, una especie de merienda, en casa del mayordomo.
En Serón de Nágima, hay una decena de personajes de la Pasión representados por gente, entre ellos Jesús con la cruz a cuestas.
En Yanguas, Un penitente porta la cruz y al paso de la procesión se encienden candiles en las ventanas. Depositado el Sepulcro en la ermita del Santo Cristo, se posa la mano en el féretro o se le besa. Como reliquia: un clavo forjado con limaduras de los clavos de la cruz de Cristo, según la leyenda. Ya de madrugada, se bebe el zurracapote.
En Medinaceli, la actividad es intensa; comenzando la jornada del Viernes Santo al mediodía con el Vía Crucis para finalizar entrada la noche con el Sermón de la Soledad y Procesión del Santo Entierro desde la Colegiata por la Plaza Mayor, hasta la ermita del Humilladero.
En Berlanga de Duero, la procesión del Entierro de Cristo recorre a partir de las 21:30 horas las calles de la Villa que vio nacer a Fray Tomás de Berlanga.