El Arca homenajea a los sanitarios
Almarza y San Andrés de Soria volverán el 6 de enero a cumplir con su tradición del traslado del arca. No han dejado de hacerlo durante más de siete siglos.Y lo harán este año con homenaje especial a los sanitarios.
La tradición del arca reivindica a los sanitarios
Adjudicada mejora del camino a la Laguna de Cebollera
https://www.facebook.com/ElMironDeSoria/videos/349588839902845
Para esta tradición se contará este año con la presencia de Miriam Pastor, hija del doctor José Pastor Blanco, el único médico fallecido en Soria a causa de la pandemia del coronavirus Covid 19, y con media docena de sanitarios vinculados a Almarza y San Andrés de Soria.
Este año no habrá limitaciones de aforo, como sucedió el precedente, en el que tan sólo una decena de vecinos de cada pueblo participó en el traslado del arca, según ha avanzado la alcaldesa de Almarza, Ascensión Pérez.
“El que quiera ir, puede ir con la mascarilla, porque es un acto en la calle. Las medidas que marca la ley son las que son; no está prohibido nada hoy por hoy”, ha señalado Pérez.
Este año, el arca saldrá desde Almarza para ser entregada en el paraje de Cantogordo a San Andrés de Soria, que se encargará durante este 2022 de su custodia.
Es previsible que este año se adelante la celebración, para facilitar la asistencia al mismo. El objetivo es estar antes en Cantogordo.
La tradición del traslado del arca nunca se ha dejado de celebrar en sus siete siglos de historia.
“El ritual del traslado, con la simbología que encierra, es obligado hacerlo y mantener una tradición que cuenta con más de siete siglos de historia. A lo largo de todas las épocas ha habido otras pandemias, catástrofes, guerras y el arca ha sobrevivido a todas ellas”, ha recalcado.
Para los vecinos e hijos de los pueblos de Almarza y San Andrés de Soria, el traslado del arca es un día señalado en su calendario. “Y no sólo en el nuestro, sino en el calendario provincial. El 6 de enero todo el mundo conoce el arca de Almarza y San Andrés de Soria”, ha resaltado.
Los dos pueblos cumplieron el año pasado con esta tradición y para ello seleecionaron cada uno de ellos a diez de sus vecinos, para trasladar a hombros este arca -desde San Andrés de Soria a Almarza-, con sus porteadores protegidos con mascarillas.
La alcaldesa de Almarza, que ha recalcado que el traslado del arca es "un tesoro cultural y sentimental", ha recordado que la historia de la tradición se remonta siete siglos atrás, cuando en 1329 el rey Alfonso de Castilla concedió privilegios reales al uso y disfrute de la dehesa "Mata", un proindiviso que han compartido hasta hoy Almarza y San Andrés de Soria y en un primer momento con otros dos pueblos hoy desaparecidos, Cardos y Pipahón.
Pérez ha recordado que el Ayuntamiento sigue esperando la resolución de la Junta de Castilla y León para que el traslado del arca sea reconocida como fiesta de interés turístico regional, por entender que cumple muchos de los requisitos exigidos, como la permanencia en el tiempo -siete siglos de antigüedad- y la originalidad.
"Ya reuníamos dos de los tres requisitos que había que cumplir. Creo que se puede conseguir por muchas razones. La fiesta en sí se ha hecho grande. Su antigüedad, con 700 años; su permanencia en el tiempo lo cumple con creces y la originalidad, también”, ha resaltado.
En cuanto a la condición de ser conocida la tradición fuera de los límites provinciales, Pérez ha asegurado que a lo largo de estos años han participado personalidades destacadas del ámbito cultural, educativo, arqueológico, etc.
“La fiesta ha llamado la atención de muchos medios de comunicación, que lo han difundido fuera de los límites provinciales”, ha apuntado.
Dos llaves
Cada pueblo tiene una llave del arca, y es necesario accionar las dos llaves a la vez para poderla abrir y comprobar, una vez al año en el paraje de "Canto Gordo", que todos los documentos están en su lugar.
En el 2002 el arca y su contenido fue minuciosamente estudiado en el Archivo Provincial de Soria, siendo la única vez que ha salido fuera de Almarza y San Andrés de Soria.
El inventario de su contenido, en buen estado de conservación, comprende 109 documentos y cuatro sellos de plomo pertenecientes a los cuatro reyes que concedieron los privilegios que figuran en sus correspondientes legajos.
El documento más antiguo data de 1329, referente al primer privilegio dado por el rey castellano Alfonso XI cediendo el uso exclusivo de una fértil dehesa -la Dehesa de la Mata- a los pueblos de Almarza, San Andrés de Soria, Cardos y Pipahón, como premio a los hombres de estas tierras que le acompañaron en la batalla y demostraron así su nobleza y lealtad hacia él.
Antiguamente el arca era portado por los quintos -los mozos a los que les tocaba hacer el servicio militar-, pero desde su supresión lo hace cualquier persona que quiera, habiéndose incorporado las mujeres en los últimos años, como han hecho este miércoles en el recorrido desde San Andrés de Soria hasta el paraje de "Canto Gordo"