Que le vaya bien, señor alcalde
Daniel Rodrigálvarez firma esta carta al director en la que felicita al alcalde de Soria por su nombramiento como secretario general de los socialistas de Castilla y León y le da una serie de consejos para su nueva andadura en la Comunidad.
La “ MadurSanchezcracia” ha dado su autogolpe esta semana
Que le vaya bien, señor alcalde
Deseo felicitarle, señor alcalde, por haber sido elegido secretario general del PSOE de Castilla y León, cargo que será oficializado en la reunión de su partido el próximo mes de febrero en Palencia.
Es un verdadero salto importante en su carrera personal, ya que desde su único trabajo fuera de la política, reponedor de estanterías en el supermercado Sabeco, y sin ninguna titulación académica, inició estudios de Ingeniería Técnica Agrícola que abandonó tras el primer curso, pasando por la UGT, ha llegado a ser primer edil de la capital, en el que lleva 17 años y, ahora, secretario general del PSOE de Castilla y León. Es un claro ejemplo de consolidación de la democracia, en la que cualquiera, si se lo propone, puede alcanzar las más altas cotas políticas, partiendo de la más humilde condición laboral, recordando a Groucho Marx.
Pero tenga en cuenta que Castilla y León es muy diferente a Soria.
Castilla y León no es socialista como usted ha señalado, y solo basta para confirmarlo ver los resultados de las elecciones comunitarias desde hace unos cuantos años. Así que tiene por delante una labor muy ardua si pretende un cambio político en la opinión de los castellanos leoneses. Aquí, en la capital, se ha ganado a pulso su larga permanencia en la alcaldía gracias a su carácter jovial, dicharachero y festivo, no tanto por las labores de gestión que precisan las necesidades de una ciudad, que ha calado en la sociedad, en particular en la juventud, por su cercanía. Si pretende actuar de la misma forma en Castilla y León necesitará un buen vehículo y mucho tiempo, que irá en detrimento de su labor de alcalde de Soria, puesto que parece ser que desea seguir ejerciéndolo.
No soy quien para recomendarle nada, pero creo que no sería adecuado que en su nuevo despacho en Valladolid colgara un retrato del Che Guevara, como tiene en lugar prominente en el de la alcaldía soriana. Se sabe que se manifiesta como un hombre de izquierdas y defensor a ultranza del feminismo, por lo cual se supone que tiene tan a la vista el retrato del revolucionario cubano como fetiche progresista, icono de rebeldía y ejemplo de admiración. Quizá en su nuevo destino no entiendan como se puede defender tales causas y admirar al Che Guevara, persona de carácter psicótico, abusador de mujeres, que odiaba a los negros, ser homófobo que encerró a cientos de homosexuales en campos de trabajo, que le gustaba matar no teniendo reparo en asesinar a varios compañeros de la revolución cubana, a quién Fidel Castro, dada su nulidad en cualquier labor de gobierno, envió a la guerrilla en Bolivia, donde murió.
Ah!, que se me olvidaba. Por favor, utilice la escobilla del váter de que dispondrá el inodoro anexo a su nuevo despacho en la función para la que ha sido diseñada y no para otros menesteres.
Que le vaya bien, señor alcalde.
Fdo: Daniel Rodrigálvarez Encabo