El banco de leche materna cumple un año ampliando sus acciones en la Comunidad
Es una opción asistencial para facilitar la alimentación a neonatos que no pueden recibir lactancia por parte de sus padres
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El programa autonómico de donación de leche materna cumple ahora un año de funcionamiento y lo hace con la ampliación de sus acciones. La opción de realizar entregas desde casa facilita que las mujeres puedan compatibilizar esta labor solidaria con la crianza de sus propios hijos.
Los bancos de leche materna son una opción asistencial reciente, creada con el fin de facilitar la alimentación mediante leche humana a neonatos que no pueden recibir lactancia por parte de sus madres o que no están capacitados para la succión, según ha explicado la Junta hoy en su página web.
En Castilla y León la central autonómica de este servicio está situada en el Hospital Universitario Río Hortega de Valladolid y celebra ahora su primer año de andadura.
Su funcionamiento ha sido posible gracias a las acciones de procesamiento, control y logística del Centro de Hemoterapia y Hemodonación de Castilla y León (CHEMCYL).
Durante este tiempo se ha atendido a 54 posibles donantes, de las que 38 cumplían con todos los requisitos necesarios para donar leche para el banco.
Su generosidad ha permitido cubrir completamente la demanda existente en los centros de asistencia especializada de la Comunidad.
Por este buen funcionamiento del Banco durante sus primeros meses de existencia, ahora se pueden ampliar sus acciones comenzando por la puesta en marcha de un servicio de recogida a domicilio de la leche materna.
Los beneficiarios de la actividad diaria del Banco de Leche son bebés prematuros, con un peso menor de 1.500 gramos o que han sufrido una cirugía cardíaca o digestiva, que no pueden acceder a la alimentación materna y que logran hacerlo gracias a la labor desinteresada de las donantes. Todas ellas madres, con buena salud, que están amamantando y, además, tienen bien establecida la lactancia de su hijo durante el primer mes de vida.
Y por esta generosidad demostrada por las madres, es necesario facilitarles las cosas lo máximo posible para evitar que tengan que desplazarse hasta el hospital cada vez que necesiten realizar una entrega. No obstante, las primeras extracciones sí que se realizarán en el centro asistencial para aclarar las dudas que puedan existir en las primeras semanas y asegurar que el proceso queda completamente comprendido por parte de las donantes. Y posteriormente, si todo va bien, se les ofrece la posibilidad de recogida a domicilio.
De este modo, el equipo encargado del programa establece un circuito de recogida semanal que incluye las casas de las interesadas con un horario fijo y establecido, un día por semana, facilitando así la organización de su rutina doméstica. Serán las propias madres las responsables de avisar al Banco, con un mínimo de 48 h de antelación, de si esa semana van a realizar una entrega o no. Y la visita a sus casas se aprovechará también para reponer el material usado por las mujeres implicadas para garantizar la seguridad del proceso (biberones, etiquetas, bolsas de esterilización…).
VENTAJAS
La principal ventaja de esta innovación es la comodidad que supone para la madre donante que se encuentra, además, en época de crianza de su propio hijo.
La recogida de leche evita, asimismo, que la leche pase demasiados días en un congelador casero, ya que estos electrodomésticos no tienen las características necesarias para mantener todas las propiedades de este alimento durante más de 15 días. A mayores, este sistema garantiza un control más estricto de la salubridad de la leche en el transporte de la misma hasta las instalaciones del Banco en el hospital, utilizándose contenedores profesionales y registros de temperatura durante todo el trayecto.
De esta manera, se da un paso más en el fomento de la lactancia materna.
Estos beneficios no son solo nutricionales: reduce el riesgo de infecciones, protege frente a potenciales enfermedades crónicas, refuerza el sistema inmunológico, etc. Todo ello sin contar que la interacción entre el bebé y la madre durante la lactancia tiene también repercusiones muy positivas en lo que se refiere a la estimulación, la conducta, el habla, la sensación de bienestar, la seguridad y la forma en la que el recién nacido se relaciona.
La lecha humana contiene todos los nutrientes, vitaminas y minerales que necesita un bebé en los primeros meses de su vida para crecer correctamente.
Por ello, la Organización Mundial de la Salud (OMS) indica que, en ausencia de la leche de la propia madre, la leche humana donada es la mejor opción para alimentar a un recién nacido sobre todo si es prematuro o está enfermo: se asimila mejor que la artificial, protege al bebé de infecciones y mejora sus posibilidades de recuperación, supervivencia y desarrollo al contener elementos inmunológicos, antimicrobianos, hormonales y factores de crecimiento.