Menos teletrabajadores en la Comunidad
Según el Monitor Adecco de Oportunidades y Satisfacción en el Empleo, ahora teletrabajan en Castilla y León 87.600 personas (-8,8% interanual). Castilla y León es una de las nueve comunidades españolas que han perdido teletrabajadores.
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Lógicamente, con tamaña reducción del número de teletrabajadores, también ha caído su peso dentro del empleo total hasta el 8,8%, 2,2 puntos porcentuales menos que hace un año (es decir, teletrabajan el 8,8% de los ocupados en la región).
Con todo, sigue siendo un porcentaje 3 décimas mayor al de 2019, antes de la pandemia. A nivel nacional teletrabaja el 12,7% de los ocupados (dos puntos porcentuales más).
Una comparativa con Europa sugiere que el teletrabajo empezó a descender en España ya en 2021, no solo antes de que alcanzara niveles homologables con los de los países más avanzados de la UE, sino mientras el teletrabajo continuaba en ascenso en los países de nuestro entorno.
El caso español se asemeja a los de Italia, República Checa y Polonia, donde la proporción de teletrabajadores no supera el 14% y fue en 2022 inferior a la de 2020.
Algo similar sucede en Castilla y León, con la desventaja de una proporción todavía más baja. El porcentaje castellanoleonés de teletrabajadores es también más bajo que en 2020 (cuando fue de un 11,7%). Entre los 20 países europeos analizados, el dato de Castilla y León actual solo supera a los de Rumanía y Bulgaria.
Castilla y León es una de las tres autonomías que ha creado empleo para ambos tipos de jornada durante 2022: mientras se han ganado 400 empleos de tiempo parcial, se han creado 25.300 plazas de jornada completa.
La proporción de ocupados a tiempo parcial se ha mantenido estable en los últimos dos trimestres, siendo de un 14,3% (sin cambios con relación al año anterior).
La proporción de empleos de alta cualificación en Castilla y León ha subido 4 décimas porcentuales en la comparación interanual hasta el 30,5% (la media nacional está en un 35,4%), es decir, 3 de cada 10 empleos en la comunidad ya son de alta cualificación.
La región es una de las cuatro que, al mismo tiempo que ha creado empleo cualificado (11.000 nuevas plazas a lo largo de 2022), ha expandido también sus puestos de trabajo de cualificación media o baja (14.700 empleos más).
La subocupación horaria es la situación que pasan aquellas personas que trabajan menos tiempo que la jornada completa, quieren y están disponibles para trabajar más horas, pero no encuentran dónde hacerlo.
Castilla y León se coloca, en este terreno, ligeramente por debajo de la media nacional, con un 8,2% de sus ocupados en situación de subocupación horaria (1 p.p. menos que hace un año; 8,3% en la media nacional). Para la región es el mejor resultado desde junio de 2008 y el quinto mejor dato autonómico.