Tierra sin Males lleva agua a El Salvador
La agrupación de la Universidad de Valladolid dDialoga y Tierra sin Males han iniciado un proyecto que garantiza el acceso al agua potable por medio de tecnológicas fotovoltaicas a 160 familias de las comunidades de Jutiapa (El Salvador).
El proyecto, iniciado el pasado 15 de febrero de 2021, ha sido financiado por la Agencia Española de Cooperación Internacional al Desarrollo (AECID) con 150.250 euros dentro de la convocatoria de 2020 y tiene una duración de 18 meses y un coste de 253.823 euros.
La iniciativa pretende dar un paso más allá sobre uno proyecto replicado en el que se aporta otro nivel de innovación y cuenta con la implicación activa de la población de cuatro comunidades de Cabañas, en El Salvador, que afecta a 160 familias y un total de 600 personas.
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El proyecto persigue garantizar el acceso al agua potable por medio de tecnológicas innovadoras y sostenibles, generando una buena gestión del ciclo del agua en zonas rurales basándose en el uso de energía fotovoltaica.
El acceso al agua potable es limitado, existe carencia en cantidad y calidad de agua para consumo y uso doméstico y acciones de prevención ante la covid-19.
Este objetivo ya se puede dar por cumplido pues el pasado viernes 27 de mayo se puso en funcionamiento todas las instalaciones y ya están completamente operativas dotando de agua potable a estas 160 familias.
Todo esto ha sido el resultado de la coordinación de estas tres entidades y los profesionales que trabajan en ellas.
Desde dDialoGa, se ha realizado la gestión ambiental y los estudios en terreno a cargo de Jorge Dieste, Ondrej Kratochvíl y la presidenta Loli Dieste.
Por parte de la Universidad de Valladolid, se ha realizado todo lo concerniente a la sostenibilidad y la alimentación fotovoltaica de las instalaciones, en lo que han trabajado Alfonso García, Víctor Alonso, Ignacio de Godos, Cesar Ruiz, Sara Gallardo, José Ignacio Morales y el Dr. Luis Hernández como responsable por parte de la UVa.
Por último, CORDES y Tierra Sin Males han sido responsables de la ejecución y coordinación del mismo, con Jorge Argueta coordinando la ejecución en terrero y Raúl Maján como responsable último del proyecto, sin olvidar la inexcusable ayuda de Eduardo Lallana y Ana Vicente.
Además, se ha contado con el apoyo de la Alcaldía de Jutiapa y con la colaboración de la AECID.
El proyecto, además de haber cambiado la vida de estas más de 600 personas al tener agua potable en sus casas, significa un gran salto que afianza la relación de la Tierra Sin Males y la Universidad de Valladolid en la cooperación al desarrollo, y para esta última supone a mayores una apuesta por materializar también en una vertiente más social todo el potencial de conocimientos que tiene, siguiendo de esta manera su apuesta por la agenda 2030 y la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU.
