ICOMOS denuncia impacto de proyecto en cocherones
El Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (ICOMOS) ha puesto en entredicho el desarrollo urbanístico en una zona del casco histórico de Soria, situada en las traseras del palacio de la Audiencia, por el impacto urbano y el volumen de la nueva construcción.
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Vistas de la ordenación de la Modificación Puntual
La Junta de Castilla y León ha autorizado esta semana la demolición de la manzana conocidas como las traseras del centro cultural Palacio de la Audiencia, en un proyecto que prevé el diseño de una nueva plaza, con dotaciones culturales, viviendas y aparcamiento subterráneo.
El informe de ICOMOS, rubricado en marzo, asegura que la nueva construcción, de cinco plantas, está fuera de los criterios de intervención en entornos históricos y además incide en la falta de un estudio arquitectónico y arqueológico del patrimonio de la zona.
También pone en duda la conveniencia del aparcamiento subterráneo previsto que pondrá en peligro los restos arqueológicos de una manzana que se situaba en plena judería.
La Fundación Docomomo Ibérico y la Asociación de Conservadores Restauradores de España ACRE enviaron sendas cartas al Ayuntamiento de Soria y a la Dirección General de Patrimonio alertadas por el derribo de los cocherones de Gonzalo Ruiz y por el impacto de la nueva ordenación en el Casco Histórico.
ICOMOS reconoce en su informe los complejos problemas que esta área urbana degradada presenta, pero subraya que la modificación tramitada no atiende a aspectos relevantes para una correcta inserción del nuevo conjunto urbano y arquitectónico en el casco histórico.
"La edificación prevista excede en sus edificabilidades, volúmenes y alturas de lo recomendable para el lugar afectando a la parcelación histórica y a los valores del Palacio de la Audiencia y de la Torre de Doña Urraca, por lo que estos aspectos tan relevantes deberían corregirse en el expediente", señala.
Además apunta que la configuración tipológica de las nuevas edificaciones se debería ajustar a la parcelación histórica y atender a los volúmenes característicos del casco histórico, por lo que la planificación realizada debería modificarse, incorporando perspectivas y conos visuales desde las diversas calles y espacios urbanos, de acuerdo con las recomendaciones internacionales, para justificar la adecuación arquitectónica a los valores presentes en el conjunto.
El aprovechamiento resultante sobre la parcela neta descontando las cesiones al este para espacios libres y viario es cercana a 1,40 m2/m2 lo que resulta ser, a juicio de Icomos, un índice "excesivo" para una parcela tan extensa, y esta circunstancia puede estar en el origen de la inadecuada solución que se plantea para este ámbito tan relevante del casco histórico a cuya condición de Bien de Interés Cultural, "consideramos que no atiende!.
El proyecto plantea una edificación homogénea hacia las calles para crear una suerte de nueva Plaza Mayor en el interior, con una altura total de 14 metros sobre la misma (en la práctica equivalente a unas 5 plantas de altura) y hasta 20 metros en la esquina suroeste de la calle Betetas.
