Ólvega honra a sus antepasados con la "Segunda Numancia"
Ólvega conmemora este sábado, un año más, el homenaje a sus antepasados, con la celebración de la "Segunda Numancia".
Noviercas registra un microsismo en la madrugada del sábado
Programa de actividades para un fin de semana en Ágreda
Los actos comenzarán a las siete de la tarde en el centro social, donde los chicos del IESO Villa del Moncayo y del colegio Virgen de Olmacedo contarán la historia de Ólvega.
A continuación, se celebrará un concierto de Trovadores de la Paz con el Coro Virgen de Olmacedo.
A las ocho de la tarde, según el programa publicado por el Ayuntamiento de Ólvega en su página web, habrá un pasacalles con la Banda Municipal pasando por la ermita de Los Mártires, donde se realizará una ofrenda de flores.
A continuación se asistirá a la quema del castillo y el reparto de bocadillos de chorizo y bebida en la calle Fuente del Suso.
La conmemoración está organizada y colaboran en la misma Trovadores, Coro Tercera Edad, AMPA, APA, Niña del Moncayo, Chiquilandia, Banda Municipal, Los Mártires y Ayuntamiento de Ólvega.
Así se escribió la historia de los antepasados de los habitantes de Ólvega:
Don Pedro I nada puedo ofrecer a los Duques de Medinaceli, puesto que todavía no había Ducado, hasta 1479 (un siglo después).
Dos incendios sufrió la villa; uno en tiempo de las luchas entre los hermanos bastardos Don Enrique y Don Tello, ayudados por el rey de Aragón Don Pedro IV, contra el rey de Castilla Don Pedro I, que "entraron por combate y fuerza de armas en Ólvega, la saquearon y quemaron" (J. Zurita, Anales, tomo II, cap. 25)
En el año de 1474, Don Enrique IV hizo merced de Ágreda y de Ólvega y sus aldeas al Conde de Medinaceli (después Duque, en 1479). Ni Ágreda ni Ólvega aceptaron su señorío y el Conde mandó poner fuego a una torre donde el pueblo de Ólvega se había hecho fuerte. No es cierto que los vecinos mismos dieran fuego a su fortaleza, fue Don Carlos de Luna, marqués de Ciria y Borobia, capitán general del conde.
No hay duda de que en esta villa de Ólvega existió una torre o fortaleza, cercada y abrasada en 1474, pues así lo explica la lápida que hay en el muro del lado del evangelio, en la iglesia de Los Mártires. Dice así: " Año de 1474, a 14 de marzo el conde Don Agastón de la Cerda, conde de Medinaceli, puso cerco a este lugar de Ólvega con 5.000 hombres de a pie y a caballo, y tuvo cercada la torre de dicho lugar cinco días y al fin de los cuales, que fue a 19 de dicho mes, puso fuego a la torre, después de haberla combatido cinco días. Y murieron abrasados por el fuego cerca de 430 personas, entre ellas 25 desposadas. Rueguen a Dios por ellos".
Las víctimas de aquel voraz incendio fueron sepultadas en una iglesia romántica, que desde entonces tiene el título de Los Mártires.
"Aquí yacen sepultados
los mártires inocentes,
ejemplo de los pasados
modelo de los presentes"