Autorizada la granja porcina, de 4.368 plazas, en Monteagudo de las Vicarías
La Consejería de Fomento y Medio Ambiente ha informado favorablemente la declaración de impacto ambiental para la instalación de una explotación porcina, de 4.368 plazas de cebo, en Monteagudo de las Vicarías.
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La Junta autoriza una explotación porcina en Monteagudo de las Vicarías
El BOCyL de hoy martes publica la declaración ambiental con una serie de condicionantes para el promotor, Julio José Rodrigalvarez.
El proyecto se ubica en la parcela 497 del polígono 14, en el término municipal de Monteagudo de las Vicarías, con una superficie de 99.896,37 metros cuadrados.
La parcela se encuentra dentro de la zona de especial protección para las aves (ZEPA), denominada "Monteagudo de las Vicarías".
La explotación se proyecta para el cebo de cerdos, para lo que se construirán dos naves idénticas, de 129,76 x 14,48 metros. Cada nave se distribuirá en dos salas divididas en parques o corralinas.
Para el llenado de la granja, se harán lotes de animales según la capacidad de las naves. Se realizarán 2,4 ciclos de cebo al año. El peso de entrada de los animales es de 18-20 Kilogramos y el de salida de 95-100 kilogramos
Para la obtención de agua potable, se ejecutará un sondeo en la propia parcela, estimándose un consumo de 11.692 metros cúbicos anuales.
El suministro eléctrico dependerá de un grupo electrógeno alimentado por gasóleo, ubicado dentro de la parcela y se procederá al vallado de cada nave y de la balsa exterior de purines con malla metálica de 2,00 metros de altura.
Se proyecta la instalación de una balsa de almacenamiento de purines con cinco metros de profundidad y 5.666,67 metros cúbicos de capacidad, impermeabilizada mediante instalación de lámina de 1,50 mm de espesor de polietileno HDPE, sobre la que se proyectarán dos capas de 7 y 3 cm de hormigón gunitado con fibras de polipropileno.
Las deyecciones ganaderas serán objeto de valorización agrícola conforme al Plan de gestión presentado. Las deyecciones producidas por los animales se depositarán en la balsa de almacenamiento exterior, con capacidad suficiente para almacenarlas durante más de seis meses. De forma periódica se esparcirán a modo de abono por el conjunto de fincas comprometidas para ello, disponiendo de un total de 88,25 hectáreas, superficie superior a la necesaria para dicha gestión, estimada en 85 hectáreas.
El proyecto no se encuentra en zona designada como vulnerable a la contaminación de las aguas por nitratos procedentes de fuentes de origen agrícola y ganadero, si bien debe contar con autorización ambiental.
El estudio de impacto ambiental concluye que el impacto en todos los casos es moderado y su incidencia puede disminuir con las medidas correctoras propuestas.
El programa de vigilancia ambiental incluido en el estudio de impacto ambiental plantea el seguimiento de las medidas protectoras y correctoras contenidas en el estudio. Dicho programa permitirá medir la eficacia de las medidas correctoras propuestas y adoptar otras nuevas si fuese necesario.
Tras estudiar la ubicación de las actuaciones previstas y comprobar su coincidencia con la Red Natura 2000, el informe ambiental concluye que las actuaciones proyectadas, ya sea individualmente o en combinación con otros proyectos no causarán perjuicio a la integridad del lugar incluido en Red Natura 2000: Zepa "Monteagudo de las Vicarias".
Entre las medidas preventivas y correctoras, el promotor justificará que tanto en el diseño del proyecto como durante su funcionamiento la actividad aplica las mejores técnicas disponibles para este tipo de instalaciones, teniendo en cuenta las características, dimensiones y complejidad de la explotación.
En cualquier caso se aplicarán criterios de ahorro y consumo eficiente de agua y energía, se adoptarán estrategias de alimentación que reduzcan el nitrógeno y el fósforo excretado y se pondrán en práctica las mejores técnicas de gestión de estiércoles y purines, tanto en la fase de almacenamiento como durante la aplicación al terreno.
Si bien no se prevén molestias a las poblaciones cercanas, en caso de producirse, se establecerá un plan de gestión de olores que contemple su eliminación y/o reducción.
De acuerdo con lo anterior y teniendo en cuenta la capacidad ganadera de la granja, las superficies acreditadas y otros datos aportados en la documentación, se estima admisible la capacidad de almacenamiento exterior propuesta de 5.666,67 metros cúbicos, con independencia del volumen acumulable bajo los emparrillados del interior de las naves y de los márgenes de seguridad necesarios.
El purín producido en la explotación, se utilizará como abono orgánico-mineral mediante la aplicación en la superficie propuesta en la documentación, según contratos aportados. Cualquier cambio en dicha gestión deberá ser comunicado al Servicio Territorial de Medio Ambiente de Soria.
Con el fin de atenuar la producción de olores molestos y reducir su dispersión, se utilizarán las mejores técnicas disponibles que sean de aplicación, tales como adición a los purines de productos autorizados, enterrado inmediato de los purines en el terreno o puesta en práctica de otras medidas que incluya al efecto el citado Código de Buenas Prácticas Agrarias de Castilla y León o las Ordenanzas Municipales que le sean de aplicación.
En la fase de funcionamiento se establecerá un sistema de recogida selectiva para todos los residuos generados en la explotación. No se podrán almacenar residuos en la explotación si no es en contenedores dispuestos para tal fin.
Esta declaración de impacto ambiental perderá su vigencia y cesará en la producción de los efectos que le son propios si, una vez publicada en el Boletín Oficial de Castilla y León, no se hubiera comenzado la ejecución del proyecto o actividad en el plazo de cuatro años, a cuyo efecto el promotor deberá comunicar al órgano ambiental, con antelación suficiente, la fecha de comienzo de ejecución del proyecto.
