TRIBUNA / 23-Jul. Vote por correo: y seguro y fácil
Saturio Hernández de Marco anima en este artículo de opinión a ejercer el derecho al voto en las próximas elecciones generales del 23 de julio y hacerlo por correo, para quien no pueda hacerlo presencialmente, por ser seguro y fácil el procedimiento.
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TRIBUNA / 23-Jul. Vote por correo: y seguro y fácil
La convocatoria de elecciones del 23 de julio ha puesto de relieve muchos aspectos y, entre otros, la importancia de las elecciones, de las votaciones, y, por ello, y sobre todo, “sobre todo” la votación de los electores y su forma de hacerlo.
No vamos a expresar que se puede hacer presencialmente o por correo. Eso lo sabemos todos.
Tampoco es preciso señalar el procedimiento, que es bien simple: se pide presencialmente, o telemáticamente; se ha de señalar el domicilio en donde se quiera que se remita por la Administración las papeletas de las distintas listas.
En la petición ha de constar los datos del peticionario y el documento nacional de identidad y el domicilio en donde se quiera recibir las papeletas. Eso es imprescindible.
De tres de julio a 16 de julio quien haya pedido votar por Correo recibirá la documentación para votar, que se habrá de recibir en el domicilio que se haya indicado por correo certificado con acuse de recibo.
Hasta el 20 de julio se podrá votar; acudiendo a la oficina de Correos con presentación del DNI, el interesado votará.
Se ha de señalar lo anterior de forma sencilla y clara, porque la cuestión no es el procedimiento, es la confianza que da el voto por correo, y eso es diferente en cada persona.
Es por ello, que siempre es bueno colaborar en acrecentar es confianza, aclarando algunas cuestiones que se puede presentar o hacer dudar a las personas.
La presentación del DNI es exigencia incuestionable e imperativa y acrecienta el nivel de seguridad. Los funcionarios y personal de Correos son, ellos, fehacientes guardadores del procedimiento y de su regularidad y certeza.
Una vez terminado el procedimiento de votación, el día de la votación, los carteros reparten en cada mesa electoral en donde tenga que votar el elector, que ha elegido el voto por correo, y se entrega a quien aparezca como Presidente de esa mesa.
Este lo recibe y se ha de abrir de abrir, terminada el tiempo de votación, para acreditar que quien ha votado por correo tiene certificado de inscripción y el sobre o sobre, y los mismos se introducirán en la urna que corresponda.
Y la persona que ha votado por correo y se adjunte el mencionado certificado se anotará en la lista del censo.
Hecho el trámite, se procederá al escrutinio de todos los votos que correspondan a esa mesa. Y se reflejará la votación por correo en el acta del censo de cada mesa.
La cuestión de la duda, o de lo que puede presentarse como duda debe descartarse o debería de descartarse desde el mismo momento en que la creencia de que el voto por correo no computa, siempre pueden darse dudas, dentro del ámbito habría de descartarse dese el mismo momento en que las listas del censo, con las personas que han votado en todos sus aspectos, presenciales o por correo se apuntan o quedan reflejados en la pertinente acta.
Aún, así, puede darse la duda de que el voto enviado por correo, no entre en el cómputo de la mesa respectiva, pero eso es difícil y complejo por los mecanismos que existen, y el número de personas que intervienen en cada uno de los pasos y del procedimiento.
Por eso el voto por correo es para el 23 de julio fácil y seguro y por ello hay que promover para quien no pueda hacerlo presencialmente, que se vote por correo, por la necesidad de que se vote intensamente y votándose presencialmente y por correo por ser preciso
Fdo.: Saturio Hernández de Marco