Por debajo de inversión media para educación segura
Durante el curso 2020/2021 escolar, en Castilla y León se invirtieron de forma extraordinaria 97 millones de euros con el fin de hacer frente a la COVID-19 en el ámbito educativo, un 4,3 por ciento adicional con respecto al presupuesto de educación del curso inmediatamente anterior a la pandemia. Este porcentaje se sitúa por debajo de la media española del 7,9 por ciento.
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Este es uno de los datos recogidos en el informe de la iniciativa Cole Seguro “La inversión adicional en educación para la adaptación al contexto COVID-19 en Castilla y León: análisis del curso 2020/2021” elaborado por la Plataforma de Infancia y Political Watch; que se ha hecho público hoy.
Este informe, elaborado por la Plataforma de Infancia y Political Watch dentro de su iniciativa conjunta Cole Seguro, señala que, del total de fondos extraordinarios destinados a educación en Castilla León, el 94 por ciento provienen de la inversión estatal, siendo esta la Comunidad para la que menos inversión propia autonómica se ha detectado en las fuentes consultadas durante la investigación (sin contar a Ceuta y Melilla, donde la totalidad de su financiación proviene del Estado).
A pesar de ello, tres de cada cuatro familias consultadas en Castilla y León indican que el aprovechamiento educativo durante este curso ha sido similar al de otros cursos (58% de media en España).
En Castilla y Léon, un 77,1 por ciento de la inversión extraordinaria en educación se ha dedicado a la adaptación de la educación a los protocolos COVID-19.
Uno de cada dos euros extraordinarios invertidos, es decir, 47,6 millones de euros, se han dedicado a la contratación de personal docente adicional.
Este hecho se valora positivamente por las familias, ya que casi dos de cada tres familias en la Comunidad consideran que reducir el número de estudiantes por aula ha mejorado la calidad de la educación (60,8%).
La limpieza y desinfección de centros educativos, así como la compra de materiales de protección personal han conllevado la inversión del 6,3% y 4,9% del total de los fondos disponibles respectivamente.
Por último, se ha dedicado un 10,6% de la inversión extraordinaria en educación a la extensión de la educación digital. Mientras que en el primer trimestre solo el 39% de las familias en España manifestaban que la educación digital en sus centros era buena o excelente, a final de curso esta proporción ascendía a un 60,3% en Castilla y León (53% en el conjunto de España).
La financiación en este concepto se ha dedicado principalmente a la adquisición de dispositivos digitales, invirtiendo casi 8 millones de euros, una media de 16,3 euros por estudiante.
En mayo algunos de estos dispositivos aún no se habían entregado y que en junio todavía algunos contratos no se encontraban licitados.
Garantizar la equidad educativa es el concepto, después de la adaptación a los protocolos COVID, al que se ha dedicado mayor porcentaje de la inversión extraordinaria en educación, un 12,2 por ciento.
Medidas insuficientes
Sin embargo, el 41 por ciento de las familias en Castilla y León considera que las medidas para garantizar la igualdad de oportunidades siguen sin ser suficientes, 7 puntos por debajo de la media estatal.
Esta opinión contrasta con el hecho de que a nivel de inversión, Castilla y León se encuentra por encima de la media estatal en inversión en equidad educativa.
El apoyo a las necesidades educativas especiales ha recibido más de un millón de euros y los programas de refuerzo educativo han recibido 3,2 millones de euros, representando el 1,1% y el 3,3% de los fondos extraordinarios disponibles respectivamente.
Es importante señalar también que, 1 de cada 3 niños y niñas en Castilla y León han visto alterado su derecho al descanso en el centro escolar: en el 4,8% de los casos no han podido salir al patio durante la hora del recreo y en un 31,2% solo han podido salir algunos días a la semana.
Además, 4 de cada 5 familias (83%) en Castilla León consideran que las medidas que se han tomado pueden impactar negativamente en la salud mental y el bienestar emocional de los niños y niñas. Sin embargo, no se ha encontrado ninguna evidencia de ejecución presupuestaria relativa a estos programas durante el curso 2020/2021.
Por último destacar que el nivel de accesibilidad a la información en Castilla y León fue medio, no se han obtenido respuestas a ninguna de las consultas realizadas desde Cole Seguro a la Consejería de Educación y los portales de información del Boletín Oficial y de las Cortes cuentan con una serie de puntos de mejora.