Ningún positivo en alcohol y drogas en controles de transporte escolar
Más de 460 vehículos dedicados al transporte escolar y de menores en Castilla y León han sido controlados durante la campaña especial de vigilancia que la Dirección General de Tráfico ha realizado entre el 3 y el 7 de febrero para comprobar que los vehículos dedicados a este tipo de transporte cumplen la normativa establecida.
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Durante estos cinco días de campaña, se ha constatado en Castilla y León que de los 465 vehículos controlados por los agentes de tráfico, 154 han sido denunciados, sobre todo por irregularidades administrativas.
La DGT ha destacado que en esta campaña, que ningún conductor ha dado positivo en los controles preventivos de alcohol y drogas realizadas por los agentes a los conductores de transporte escolar, y ningún conductor ha circulado con exceso de velocidad en Castilla y León.
Respecto al uso del cinturón de seguridad en aquellos vehículos que los llevan incorporados, en las inspecciones realizadas por los agentes se constató que todos los vehículos que disponían de estos sistemas de retención presentaban funcionamiento correcto.
Las irregularidades administrativas son las que mayor número de denuncias han generado.
Por ejemplo, no disponer de la autorización especial para realizar transporte escolar ha supuesto la denuncia a 116 vehículos y 44 por no tener suscrito un seguro de responsabilidad ilimitado, como exige la ley.
Los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil en Castilla y León también han comprobado que 8 vehículos de transporte escolar presentaban deficiencias en las puertas de servicio y emergencias, así como en sus dispositivos de accionamiento y 1 fueron denunciados por no tener en regla la Inspección Técnica de Vehículos.
Además, 19 vehículos controlados no llevaban la correspondiente señal V-10 de transporte escolar y otros 6 carecían del dispositivo luminoso con señal de emergencia.
Por último, en lo que se refiere a la persona encargada del cuidado de los menores, cuando así procedía, 2 de ellos fueron denunciados por este motivo.
La preocupación de la DGT para que el transporte de menores se realice de forma segura, lleva a los agentes a realizar permanentemente controles en este tipo de vehículos.
Ningún positivo a alcohol y drogas en los controles realizados a los conductores de transporte escolar
