Sordo prefiere inversión pública a fiscalidad diferenciada

El secretario general de Comisiones Obreras, Unai Sordo, se ha decantado este miércoles más por las ayudas públicas a las provincias despobladas, más que por la fiscalidad diferenciada que el Gobierno de España sigue sin aprobar para Soria, Teruel y Cuenca.

Sordo, a preguntas de los periodistas antes del inicio del congreso de delegados de su sindicato en Soria, ha manifestado que las experiencias internacionales conocidas de fiscalidad diferenciada cuando se dirigen a una reducción de impuestos o de cotizaciones sociales, no suelen tener un efecto positivo.
"Más bien hay que poner encima de la mesa ayudas no tanto a las empresas como a los territorios, facilitar la instalación de empresas y evitar el dumping fiscal, que las zonas más pobladas y fuertes de España se dedican a reducir impuestos para atraer empresas que podrían instalarse en otras partes de España", ha asegurado.
Sordo ha señalado que la utilización de los fondos de recuperación europeos debieran identificar proyectos tractores que puedan servir en la España vaciada para generar empleos.
"Creo más en esa inversión pública que en las políticas de reducción de costes salariales y fiscales a las empresas. Creo que tienen pocos efectos y al final acaban siendo contraproducentes. Las ayudas públicas tienen que ser a los territorios no exclusivamente a las empresas", ha argumentado.
Sordo ha reconocido que en la denominada España vaciada hay un problema, donde una parte del país se está quedando fuera de algunos de los procesos de modernización, por lo que ha pedido que las políticas públicas tengan una tendencia a "reequilibrar" el territorio.
"La utilización de los fondos europeos de recuperación, en la medida que pueden inducir a actividad económica y generación de empresas y de trabajo, debieran de tener en cuenta la variable de territorios como Soria, para tratar de impulsar la creación de industrias y puestos de trabajo, y por lo tanto, el asentamiento de población", ha manifestado.
Por otra parte, ha asegurado que la negociación de la reforma laboral está siendo muy complicada porque se hizo con la intención de rebajar los salarios en España y precariezar el empleo y facilitar el despido y que los empresarios puedan modificar a su gusto las condiciones de trabajo.
"Cuando se da tanto poder a una parte, no es sencillo que esa parte renuncie a ese poder. Pero creo que hay que intentarlo. Hay un compromiso en el marco del diálogo social para estabilizar la contratación y evitar la lacra que casi el 30 por ciento de los trabajadores tengan contratos temporales", ha subrayado.
Sordo ha recalcado que los "bajos salarios" es también un motivo para la despoblación, porque la gente emigra es porque no encuentra salarios suficientes para llevar una vida en su territorio