Particular penitencia para los usuarios de la Juventud
Los usuarios de la piscina cubierta de la Juventud han vivido el Viernes de Semana Santa su particular jornada de penitencia.
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Una veintena de usuarios se han encontrado cerrada este Viernes Santo la piscina de la Juventud, cuando acudieron a las nueve y media de la mañana.
Los usuarios estuvieron media hora esperando su apertura, según han denunciado hoy a EL MIRÓN DE SORIA, pero finalmente lo único que encontraron fue la disculpa de la Policía Municipal que se desplazó hasta la instalación deportiva.
El trabajador que tenía que acudir a abrir la instalación, no se personó en la misma, tras acudir en la tarde del jueves al hospital Santa Bárbara y coger la baja debido a una enfermedad, ni tampoco ningún sustituto, ya que no existe turno de movilidad, suprimido por el Ayuntamiento de Soria.
El trabajador que cogió la baja informó a su superior en la misma tarde del Jueves Santo, según fuentes sindicales, pero nadie acudió a sustituirle en la mañana del Viernes Santo. Por la tarde, con el cambio de turno en el cuadrante laboral, acudió otro trabajador y se abrió la piscina de la Juventud.
La causa de esta falta de servicio, según han resumido fuentes sindicales, es que falta personal y el Ayuntamiento de Soria no quiere pagar estos trabajos de refuerzo.
La Inspección de Trabajo han dado la razón a los trabajadores y han sentenciado que estos trabajos de refuerzo hay que pagarlos.
Algunos de los usuarios de las piscinas municipales cubiertas han lamentado la deficiente organización que existe, con cierres y cambios de horarios durante todo el año.
El Sábado Santo, la piscina del Asperón, cerrada a los usuarios, invitaba a los usuarios a trasladarse a las instalaciones de la Juventud o de Fuente del Rey, cuando la piscina de está última también está cerrada durante todos los fines de semana del año.