Jueves La Saca, el día más esperado por los sanjuaneros
El origen de la traída del ganado se remonta al siglo XVI, con la instauración oficial de las corridas de toros
Los tres rejoneadores, a hombros, en la primera de la feria de San Juan
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La Saca, posiblemente el festejo más esperado por los sanjuaneros, ya está aquí. A las doce del mediodía de mañana jueves, los corrales de Cañada Honda vivirán el momento mágico por excelencia de las fiestas de San Juan. Después, por delante, quedan ocho kilómetros para conducir los utreros hasta la plaza de toros.
Es una de las estampas más bellas de las Fiestas de San Juan. A las doce del mediodía, los novillos, que se encuentran en Valonsadero, son guiados por caballos y sanjuaneros de a pie a la plaza de toros de Soria.
La salida oficial de la comitiva del Ayuntamiento y los jurados de cuadrilla partirán a las nueve y media de la mañana desde la plaza Mayor, en dirección al monte Valonsadero.
A las doce del mediodía es la hora. Los corrales de Cañada Honda se abrirán para trasladar a los utreros hasta la Vega de San Millán. En torno a las 14:30 horas, volverán a salir los toros hacia la capital. Hasta las seis de la tarde, como mucho, se aguantará para dar por cerrada La Saca.
A las seis y media se celebrará en la plaza de toros la tradicional suelta de vaquillas, bajo la supervisión del director de lidia Enrique Martinez Zazo "Chapurra".
A las ocho y media de la tarde, la programación recoge un baile público en la plaza Mayor, amenizado por la Banda Municipal de Música. A las doce de la noche, comenzarán las verbenas organizads por el Ayuntamiento, en la plaza Herradores, con la orquesta Dominó; en la plaza San Clemente,con la orquesta Don Blas, y por la peña El Bulllicio, en la plaza del Salvador, con la orquesta Nueva Orfeo.
ORIGENES
El origen de La Saca se remonta al siglo XVI, con la instauración oficial de las corridas de toros en 1574, consiste en la traída de los toros desde los corrales del monte Valonsadero hasta los encerraderos en la plaza de toros. Antiguamente, los encargados de traer los toros, eran los "Cabañeros" del barrio de Las Casas.
La construcción de la Plaza de Toros y la inauguración de la Carretera de Burgos modificó substancialmente las características de la Saca pero la convirtió en un acto popular. En la Reforma de las Ordenanzas de 1914, se instaura la celebración de una capea de vaquillas cedidas por los proveedores de los toros o por la Sociedad de Ganaderos Sorianos.
