La nueva EDAR de Soria entrará en servicio en 2025, tras "rescate" de Junta
La nueva estación depuradora de Soria, enclavada en el vecino término municipal de Los Rábanos, encara su puesta en servicio, tras culminarse la perforación del túnel de casi 5 kilómetros. La financiación se ha disparado a 80 millones. La aportación económica de la Junta ha permitido afrontar este proyecto.
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El consejero de Medio Ambiente de la Junta, Juan Carlos Suárez Quiñones, ha participado este lunes en el acto de final de perforación del túnel del emisario de la obra, un proyecto que finalmente se irá a los 80 millones de euros, de los 50 estimados inicialmente, y que supondrá un mayor compromiso económico del Gobierno regional.
Suárez Quiñones ha recordado a los periodistas como la Junta salió al rescate del Ayuntamiento de Soria, tras la solicitud de su alcalde, para financiar esta infraestructura, que permitirá dar un salto de calidad medioambiental a las márgenes del Duero a su paso por la capital.
El esquema financiero de la obra era que el 35 por ciento se financiaría con fondos europeos y el 65 por ciento por el Ayuntamiento de Soria, del cual la Junta asumió el 32.5 por ciento.
A dicho fin, la Consejería, hoy de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, concedió una subvención directa a la empresa pública estatal ACUAES de 22,2 millones de euros con aportaciones anuales hasta el año 2050.
Suárez-Quiñones ha recordado la “historia” de esta nueva EDAR, y se ha remontado hasta el año 2018 cuando el alcalde de Soria solicitó ayuda para hacer frente a la inversión.
“El alcalde se puso en contacto con la Junta y puso de manifiesto que el Ayuntamiento no podía acometer esa financiación (65 por ciento), con lo que la Junta, quiso ser parte de una solución, aunque es una obra de interés general y debía asumirlo la Administración General del Estado”, ha recordado.
Suárez ha cifrado en algo más de 24 millones, incluidos gastos financieros, la aportación de la Junta a la nueva EDAR de Soria.
En la primera parte del año 2025, Acuaes ha emplazado a poner en marcha esta nueva EDAR, que tendrá una vida útil de “muchísimos años” y solucionará el problema de depuración en Soria capital.
Según la información suministrada por ACUAES, el importe final de la actuación se estima en unos 80 millones.
Este incremento del coste de la obra se sufragará con el incremento del porcentaje de ayuda de los fondos europeos respecto al inicialmente previsto y también llevará una aportación suplementaria de la Junta de 1,8 millones, para lo cual se firmará una adenda que actualice la inversión y la participación económica de las partes, siendo la participación final de 24,1 millones.
El alcalde de la ciudad, Carlos Martínez, ha resaltado que la nueva EDAR permite desarrollar un proyecto a medio y largo plazo en Soria.
Martínez ha recordado el inicio del proyecto hace quince años, en 2009, cuando el secretario de Estado de Medio Ambiente, realizó una declaración de interés general para la nueva EDAR.
Ya antes en Soria se venía hablando de la nueva EDAR y la ministra de Medio Ambiente en 2008, Cristina Narbona, aseguró en una visita a Soria que la Junta tenía en su mano el modo en que el Ministerio de Medio Ambiente ofreciera su apoyo de inversión para la construcción de la nueva depuradora de aguas residuales y que pasaba por ubicarla en Los Rábanos, “para que la financiación del Ministerio fuera mucha más generosa, al 50 por ciento –al final ha sido del 35 por ciento- y al fondo perdido".
“No han sido pocas las vicisitudes que hemos tenido que atravesar para al final ver la luz. El Ayuntamiento de Soria era incapaz de asumir, incluso desde sus orígenes, el coste de una obra que iba a suponer más de 60 millones”, ha reconocido.
Martínez ha resaltado que el traslado de la EDAR permitirá recuperar las márgenes del Duero en un entorno turístico como la ermita de San Saturio, con la naturalización del espacio que ocupa actualmente la actual estación depuradora.
La EDAR dará servicio a una población de 135.000 habitantes-equivalentes, ampliable en un futuro hasta los 180.000, garantizando una depuración adecuada de las aguas residuales de los núcleos urbanos de Soria y Los Rábanos.
El proyecto del túnel emisario ha llegado hoy a su fin cuando a principios de junio, quedaba un kilómetro por perforar de los cinco de longitud.
La obra ha sufrido retrasos debido, en primer lugar, a la falta de elementos electrónicos para la tuneladora debido a la pandemia, la demora después en la concesión de permisos de transporte en Francia y, especialmente, el importante retraso de la compañía eléctrica en conceder la conexión y el contrato eléctrico necesario para el funcionamiento de “Saturia”, -así se bautizó la tuneladora-,
En total siete meses de retraso para iniciar la perforación, que ha sido más complicada de lo deseado, debido a los cambios que se han encontrado en los materiales de la sierra que discurre junto al Duero, entre Soria y Los Rábanos, entre Sinova y la desembocadura del río Golmayo.
