La apertura de nueva Comisaría, anunciada para 2023
La delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, ha subrayado este miércoles que el objetivo es que a lo largo de 2023 entré en servicio la nueva Comisaría de Policía en Soria, que cuenta con una inversión de casi siete millones de euros y sustituirá a una "obsoleta" instalación.
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La delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, la presidenta de la Sociedad de Infraestructuras y Equipamientos Penitenciarios y de la Seguridad del Estado, SIEPSE, Mercedes Gallizo, y el alcalde de Soria, Carlos Martínez, visitaron este miércoles las obras de la futura nueva Comisaría de Policía Nacional de Soria, que se construye actualmente en una parcela de 3.000 metros cuadrados cedida por el Ayuntamiento en la rotonda de las calles Duque de Ahumada y León, con un presupuesto de más de 6,8 millones de euros y un plazo de finalización previsto de 15 meses.
Barcones ha recordado que las obras suponen cumplir con una necesidad para la provincia y ha señalado que cuando entraron en el Gobierno de España la idea era remodelar la antigua sede del Banco de España para el traslado de la Subdelegación del Gobierno de España y, a su vez, la ocupación de la sede de este por parte de la Comisaría de Policía.
"Hicimos muchos viajes a Madrid y por parte de la Dirección General de la Policía se entendió la necesidad de tener unas infraestructuras adecuadas a la excelente labor que presta la Policía Nacional", ha subrayado.
Barcones ha subrayado que el objetivo es que a lo largo de 2023 entré en servicio la nueva Comisaría de Policía, que se está edificiando en unos terrenos cedidos por el Ayuntamiento y constará con una superficie construida de 5.442 metros cuadrados, organizados en dos edificios, de cuatro plantas y dos sótanos.
El proyecto, que fue presentado en septiembre del año pasado, ha avanzado en la primera parte del proceso de construcción, y previsiblemente estará ffinaliza la obra civil para el segundo trimestre de 2023, para sustituir las actuales instalaciones situadas en el centro de la ciudad, ya obsoletas y sin las condiciones de operatividad necesarias.
Funcionalmente, el edificio se organiza en dos áreas claramente diferenciadas: el complejo se organiza en dos volúmenes unidos por el núcleo de comunicaciones, el primero de ellos que albergará los usos de atención al público en planta baja, que tendrá el acceso principal por la calle León.
El alcalde de Soria, Carlos Martínez, ha reconocido que la obra venía siendo demandada desde hace "largo tiempo" por los propios profesionales de la Policía y que, a su juicio, "ya es una realidad, porque la obra que nunca se acaba es la que no se empieza".
La obra movilizará ocho millones de euros para esta nueva comisaría que sustituirá la "obsoleta" actual, enclavada en lo que fue un hostal de la ciudad.
Por su parte, la presidenta de la Sociedad de Infraestructuras y Equipamientos Penitenciarios y de la Seguridad del Estado (SIEPSE), Mercedes Gallizo, ha recordado que la nueva comisaría forma parte del Plan de Infraestructuras de la Seguridad del Estado, aprobado en 2019 por el Gobierno de España, y que está movilizando una inversión "que hacía décadas que no se conocía para renovar las infraestructuras de Policía y Guardia Civil, muy necesitadas de esta renovación".
Gallizo ha avanzado una próxima visita del ministro del Interior, Grande-Marlaska, para conocer la evolución de las obras y anunciar, previsiblemente, la apertura de algún modulo más en el nuevo centro penitenciario de Soria
Además de la seguridad y la funcionalidad otra de las principales premisas tenidas en cuenta en el proyecto de esta infraestructura ha sido diseñar un edificio sostenible.
Fundamentalmente se ha proyectado en base al cumplimiento de la limitación de la demanda energética, atendiendo a las especificidades del clima en Soria, que corresponde a un clima plenamente continental, con inviernos fríos y veranos muy calurosos durante las horas del día, con una diferencia de temperatura día/noche muy amplia.
Para ello, se ha tenido especial cuidado tanto en la elección de los materiales como en la disposición de los diversos elementos. Está prevista una fachada ventilada formada por piedra caliza en su cara exterior, acompañada de una celosía de lamas que permita un control solar eficaz en las zonas de huecos de ventanas.
En apoyo de este y otros sistemas pasivos, se ha implementado un diseño de las instalaciones que permitan lograr una gran eficiencia energética del edificio, que junto a la seguridad es uno de los objetivos clave de esta edificación
Estos y otros parámetros, tales como la gestión de residuos durante la obra y la utilización responsable de los recursos de la zona, permitirán que el edificio no sólo cumpla con las exigencias de la normativa cara a ser Edificio de Consumo de Energía Casi nulo (EECN), sino que esté certificado por un organismo independiente, Green Building Council España (GBCe), con hasta 3 hojas verdes, que garantiza la obtención de los objetivos de sostenibilidad y compromiso con la Agenda 2030
Para la consecución de todo ello, se instalarán distintas fuentes de energía renovable tales como la cogeneración solar con paneles híbridos, aerotermia de alta eficiencia, pozos canadienses y la conexión a la red Soria Calor de biomasa, así como la implantación de un diseño eficiente de las instalaciones, con sistemas de gestión y monitorización y la multiplicidad de equipos y sistemas que permitan un rendimiento estacional.
