El Partido Castellano reivindica más compromiso
Soria ha sido hoy el escenario elegido por el Partido Castellano-Tierra Comunera (PCAS-TC) para conmemorar sus 35 años de existencia, aniversario que la formación comunera ha celebrado reivindicando más compromiso castellanista a la sociedad, y especialmente a los medios de comunicación, a las instituciones y sobre todo a la juventud.
La elección de Soria como ciudad protagonista para esta conmemoración tiene un doble motivo.
Por un lado, recordar que esta formación castellanista celebró su Congreso Fundacional el 8 de diciembre de 1988 en el Hotel Alfonso VIII de Soria; por otro lado, desde el PCAS-TC se ha pretendido poner el foco en la ruralidad, como ámbito de oportunidades frente a la despoblación y el abandono que las administraciones autonómicas y estatales recordando que Soria es la provincia menos poblada de toda España, la única con menos de 100.000 habitantes, y que en 1-900 reunía a 156.000 sorianas y sorianos, y en 2023 cuenta con 89.000 residentes (ha perdido el 45 por ciento de sus habitantes, mientras que España que no llegaba a 19 millones de habitantes en 1900, tiene 48 millones en la actualidad, incrementando su población en un 153%); un fenómeno común de despoblación, envejecimiento y huida de los jóvenes común a la práctica totalidad de las provincias castellanas.
El PCAS-TC ha realizado un acto conmemorativo y reivindicativo de su 35 aniversario en el mismo lugar en que se fundó: el Hotel Alfonso VIII de Soria, en el cual han participado integrantes fundadores de este partido comunero, así como responsables actuales del partido, que han alaizado la trayectoria de la formación comunera, la actual situación de las comunidades castellanas y las reivindicaciones sociales, políticas, económicas y ecológicas de la Castilla actual.
En este sentido, ha ratificado sus compromisos ideológicos reivindicando claramente la unidad de las comunidades autónomas castellanas y la construcción de un modelo federalista para España, donde todos los territorios disfruten del mismo nivel de autogobierno y cese el tratamiento privilegiado, asimétrico y discriminador de determinadas autonomías frente a las comunidades castellanas, aragonesa, extremeña o gallega, entre otras.
El secretario general del PCAS-TC, Luis Marcos, también miembro fundador de la formación castellanista ha asegurado sentirse “orgulloso de pertenecer a un movimiento popular castellano y comunero, que durante 35 años ha mantenido viva la llama de la nación castellana y los ideales de los Comuneros de Castilla, reivindicando desde sus inicios una democracia real, transparente y participativa, así como políticas decididas contra la despoblación rural y por el desarrollo endógeno y autocentrado de Castilla mediante el aprovechamiento integral de sus propios recursos humanos y territoriales”.
Hoy, en 2023, el PCAS-TC se define como una formación progresista, ecologista, feminista y transformadora, y dirige sus prioridades en movilizar a la juventud para que apueste por el activismo castellanista, desplegando propuestas sociales, culturales, económicas y políticas que construyan un proyecto propio para Castilla, solidario, moderno, de democracia avanzada, verde y comunero; en suma el castellanismo del siglo XXI, "verdadera alternativa ante la parálisis esclerótica de los partidos políticos tradicionales, corruptos, vacíos de ideales y de principios, constituidos en patéticos instrumentos de intereses particulares ajenos a las exigencias y esperanzas de la sociedad".
Marcos ha repasado 35 años del proyecto castellanista de la formación política que dirige afirmando “hemos mantenido los principios de la Revolución Comunera, de liberales, progresistas, federalistas, regeneracionistas, regionalistas, feministas y nacionalistas, que a lo largo de más de 500 años han soñado y luchado por una Castilla más abierta, libre, rebelde y trasformadora".
El acto conmemorativo celebrado hoy en Soria, ha permitido recordar cientos de actos reivindicativos realizados para exigir la devolución del patrimonio castellano expoliado, contra el trasvase Tajo-Segura, por la desnuclearización de Castilla, por un Medio Rural Vivo, por las infraestructuras olvidadas en todas las provincias castellanas, por la comarcalización como mecanismo avanzado para articular nuestro medio rural, por un futuro digno para los jóvenes, por erradicar la corrupción, por una transición verde justa para nuestro territorio, por la unidad de las comunidades castellanas y por una sociedad feminista frente a las políticas discriminadoras por causa de género”.
