El doctor Estruch recomienda el cacao como complemento a dieta mediterránea

El cacao natural mantiene al cien por ciento las propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, así como su típico color marrón y su sabor amargo al no haber pasado por ningún proceso químico de alcalinización, pero las compañías, para reducir el sabor amargo, añaden azúcares y grasas, lo que reduce su efecto beneficioso.

"Tienen que tener los chocolates más de un 70 por ciento de cacao para conseguir este efecto beneficioso", ha puntualizado.

Estruch ha resaltado que el cacao es uno de los productos más saludables que tiene a su alcance el consumidor y lo ideal, a su juicio, es que sirviese de complemento a la dieta mediterránea.

El consultor sénior en Medicina Interna del Hospital Clinic de Barcelona ha lamentado que la sociedad española esté perdiendo la dieta mediterránea, cuando ha sido aceptada por los norteamericanos como la más saludable.

Estruch ha señalado que en la salud no sólo influye la alimentación, siendo importante, sino también la actividad física y saber disfrutar de la comida y de la vida.

"Estamos adquiriendo costumbres que no son nuestras y por eso aumenta la obesidad. A pesar de esto, tenemos unos índices de salud buenos. Pero el tema es que los países anglosajones están adquiriendo la dieta mediterránea y nosotros la estamos perdiendo", ha asegurado.

Para Estruch, el estilo de vida que llevan los españoles, marcado por las prisas, hace que coman rápido sin programar, ante la falta de tiempo para cocinar.

En este sentido ha animado a la sociedad a regresar a los buenos hábitos, no sólo alimenticios sino también destinados a mejorar la actividad física.

El también profesor de la Facultad de Medicina de la Universidad de Barcelona ha lamentado que los jóvenes estén perdiendo las enseñanzas sobre nutrición que tienen sus mayores, por lo que ha pedido colaboración a los medios de comunicación, las escuelas, los centros de salud y los médicos de empresa para educar a la sociedad en la buena dirección.

"El estudio llamado Predimet, con una lista de la compra adaptada a la temporada del año, puede servir de guía alimenticia a las personas. Hemos conseguido que los que han seguido una dieta mediterránea tradicional, hayan reducido un 30 por ciento el riesgo de sufrir un ictus, un infarto o de muerte cardiovascular", ha subrayado.

En este sentido ha recalcado que seguir una dieta mediterránea permite reducir el coste de medicamentos