Los humedales de Conquezuela y Gómara, con la gestión paralizada desde 2009
Según la respuesta ofrecida por el Gobierno al diputado socialista Félix Lavilla
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La recuperación de los humedales de Conquezuela y Campo de Gomara, proyectos incluidos en 2005 en el PAES, llevan parados desde 2009, según una respuesta ofrecida por el Gobierno de España al diputado socialista Félix Lavilla, que se interesó por el asunto.
El estudio que se realizó de las propiedades que se verían afectadas por el proyecto concluyó que en el humedal de Conquezuela serían necesarias un total de 357 parcelas (230,42 hectáreas), pertenecientes a 144 propietarios, según la respuesta oficial del Gobierno.
Por su parte, el humedal de Campo de Gómara requería 56 parcelas (163,48 hectáreas), pertenecientes a 29 propietarios.
La gran mayoría de las parcelas eran productivas, lo que "dificultaría enormemente la adquisición de las mismas, que tendría además un coste superior a 3 millones de euros", según subraya el Gobierno.
"Cabe señalar que ambas actuaciones disponen de proyecto pero su gestión se detuvo en el año 2009", apunta.
En el caso de la laguna de Conquezuela, el coste de expropiación se elevaba a 1.725.000 euros, cuatro veces superior al presupuesto base de licitación del propio proyecto (407.390 euros), según informe realizado por la Confederación Hidrográfica del Duero.
CONQUEZUELA
En años lluviosos, el paraje donde en un tiempo existió la laguna de Conquezula vuelve a mostrar su antiguo aspecto con las tierras anegadas. Al lugar se puede acceder desde Sigüenza tanto por la carretera de Alboreca, pasado el pueblo de La Ventosa como por la carretera de Horna, atravesando Miño de Medinaceli hasta Conquezuela. La zona, cercana a los yacimientos prehistóricos de Ambrona y Torralba, debió ser desde tiempos remotos terreno pantanoso debido al suelo arcilloso que dificulta el drenaje del agua.
A finales de la década de los cincuenta del pasado siglo, en 1959, se decidió desecar la laguna coincidiendo con los planes de concentración parcelaria llevados a cabo en la zona por parte del extinto Instituto Nacional de Colonización. En aquella época los humedales se consideraban zonas poco saludables y propensas a la propagación del paludismo y otras enfermedades.
Al transformarse en zona de cultivo de cereales, se acabó con la vegetación autóctona plantándose árboles como los chopos con gran capacidad de absorción de agua. Para drenar el agua se excavaron numerosas acequias conectadas a un cauce situado tierras abajo. El aprovechamiento agrícola (cereal y girasol) y las sequías hicieron que la antigua laguna desapareciera casi por completo.
Con posterioridad se hicieron intentos de cambiar el uso del terreno para convertirlo en zona de pastos al tratarse de una zona situada por encima de los 1.100 metros de altitud con un limitado rendimiento agrícola.
En mayo de 2005 se recogía en el Plan de Actuación Específico para Soria (PAES) una propuesta planteada por la Asociación Soriana para la Defensa de la Naturaleza (ASDEN) sobre la recuperación de la laguna de Conquezuela. Se elaboró entonces un informe de viabilidad que contemplada la regeneración y restauración del ecosistema natural de la laguna, proponiendo la intervención en el sistema hidrológico con el taponamiento de la red de drenajes con el objetivo de convertir la laguna en lugar de uso público y educacional enfocándolo a un hábitat de aves.
Tras diversos trámites administrativos se presentó el informe de viabilidad en el que se planteaba la expropiación de tierras. La aprobación por la Secretaría de Estado de Medio Rural y Agua se hizo con los condicionantes de llegar a un acuerdo con las entidades territoriales competentes en el que se establezcería la responsabilidad respecto a los gastos de mantenimiento, explotación y conservación.
El coste de las expropiaciones y la crisis frenaron el proyecto definitivamente en 2011 y desde entonces no se había vuelto a hablar de ello.
Contra el proyecto juega la reciente instalación en la zona de un parque eólico que parece poco compatible con el uso de la laguna como lugar de hábitat de las aves.
