Silvia Alcalá, con sus "Miradas", en el Palacio Ducal de Medinaceli
Colección de retratos de rico cromatismo
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Silvia Alcalá presenta mañana sábado (20:00 horas) en el Palacio Ducal de Medinaceli su colección de retratos de rico cromatismo y profunda personalidad.
Evocan múltiples lugares de la mirada o miradas que son lugares, miradas en sus personajes claramente inventados o claramente buscados en el catálogo de la historia, el humanismo o pensamiento.
Alcalá (Barcelona, 1970), licenciada en Bellas Artes y en Historia del Arte, es pintora libre, de método amoroso, amable y generoso. Fuera de modas y tendencias, su pintura, como ella, es auténtica. Es el resultado de un paulatino crecimiento personal en su aventura particular, en su vida de artista.
Pintura muy cromática. Esa es la inmediatez, el “primo viso”. Color, puro color, Color como un necesario territorio de energía positiva.
Antaño, investigadora del arte sagrado del Tíbet y la India, con sus cargas cromáticas simbólicas, tántricas incluso, inspiran su obra. También al color en lo primitivo, lo medieval, lo transgresor, lo urbano. Una buena prueba de que las Vanguardias Artísticas del siglo XX quedaron inconclusas, y es que en ellas, quedaba mucho por hacer y decir nos dice la artista.
Alcalá compatibiliza su actividad artística en el ámbito del dibujo, la pintura y la ilustración con la docencia como profesora de Educación Plástica y Visual en la enseñanza reglada y en la enseñanza artística de adultos.
