"Doctor Zhivago, cincuenta años" llega a Gómara
La exposición se podrá ver hasta el 28 de febrero
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Gómara acoge hasta el próximo 28 de febrero la exposición "Doctor Zhivago, cincuenta años" que ha sido cedida por el Ayuntamiento de Soria a la Diputación Provincial para poder llevar la muestra a distintos municipios de la provincia.
Tras su estancia en el Salón de la Mancomunidad de Gómara, podrá visitarse en Duruelo, Tardelcuende y San Leonardo de Yagüe en fechas todavía por concretar, según ha informado el gabinete de prensa de la institución provincial.
Textos, objetos, fotos, planos y sobre todo recuerdos recopilados en un documental de Lucas Caraba son algunas de las propuestas que pueden encontrar los visitantes en esta exposición.
El presidente de la comisión de Cultura, Juventud y Deportes, Amancio Martínez, ha recordado que esta actividad se encuentra dentro de la apuesta de la Diputación provincial de Soria por acercar la cultura a los distintos municipios de la provincia, siendo en este caso cuatro localidades las que se beneficien de la muestra al haber estado directamente relacionadas con el rodaje de la cinta.
La exposición permite recordar la película Doctor Zhivago a través de un documental con veinte testimonios de personas que contribuyeron al rodaje de la cinta, que se completa con distintos objetos, material e imágenes de la época.
Entre los elementos que componen la exposición destacan algunos de forma especial como una primera edición del libro en inglés Doctor Zhivago de Borís Pasternak ilustrado de 1956. Esta obra ha sido encuadernada por el Premio Nacional de Encuadernación de 2010 y 2011 Zivor Anguiano, quien lo ha cedido para la exposición.
Gil Parrondo
También se exhiben fotografías cedidas por Gil Parrondo, Miguel Sancho y vecinos de Soria, además de planos de la reconstrucción de las calles de Moscú o documentos emitidos durante el propio rodaje como impresos de pago.
Especial mención merecen también las fotografías de Teodoro de Miguel así como las instantáneas del archivo de Salvador Vives y Amador Carrascosa, quienes participaron en el rodaje y pudieron inmortalizar estas escenas.
