Río Duero Soria vuelve a soñar con Europa
Río Duero Soria quiere que el título de la Copa del Rey, conseguido este fin de semana ante su afición después de más de una década de sequía, sirva para consolidar al equipo entre los mejores del voleibol español y para regresar la próxima temporada a competiciones europeas.
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Río Duero Soria, campeón de Copa
Más de 2.500 aficionados llevaron en volandas en la tarde del domingo a Río Duero Soria en la final de la 48 edición de la Copa del Rey, disputada en el pabellón de los Pajaritos, en un ambiente festivo de voleibol del que también fue protagonista Pamesa Teruel.
La plantilla de Río Duero Soria ha brindado este lunes el trofeo al patrón de la ciudad San Saturio, en su ermita, y después ha girado visita a la Diputación provincial, el Ayuntamiento de Soria y la Junta de Castilla y León, donde ha sido felicitado de su éxito deportivo por los máximos responsables de estas instituciones, patrocinadoras en mayor o menor medida del presupuesto del club.
Río Duero Soria es la última marca del voleibol soriano en máxima categoría, tras coger hace una década las riendas del equipo voleibolista del Numancia, que amenazaba desaparición.
La cuarta Copa del Rey llega tras la ganada en 1994, frente a Gran Canarias, como Grupo Duero San José, en Soria; la disputada en Málaga en 2001, frente al equipo local, como C.D. Numancia, y la conquistada ante Unicaja en Teruel en 2008.
A ello hay que sumar dos títulos consecutivos en la superliga, en las temporadas, en 1994-95 y 1995.96, y el subcampeonato en Recopa, en la final disputada el 5 de marzo de 1995, en Ginebra frente al Daytona Modena.
El voleibol soriano comenzó su trayectoria en 1978 con la fundación del C.D. San José que, de la mano de José Miguel Serrano en el banquillo y con jugadores formados en la cantera, consiguió en Xátiva una década después (1988) el ascenso a Superliga, categoría que nunca ha vuelto a perder.
El San José paso en 1998 a formar parte de la disciplina del C.D. Numancia pero una grave crisis en 2013 estuvo a punto de hacer desaparecer el voleibol soriano de máximo nivel, momento en que, de la mano de los propios aficionados, logró salvarse, naciendo Río Duero Soria como heredero de un club histórico en España.
El presidente del Río Duero Soria, Alfredo Cabrerizo, ha resaltado este lunes el éxito organizativo y deportivo conseguido en la Copa del Rey, por el que han recibido muchas felicitaciones “y luego el triunfo ha sido la guinda del pastel de un sueño”.
Además ha reconocido que sería un fracaso no conseguir la próxima temporada un patrocinador privado en Soria para afrontar la competición europea, a la que regresarían 15 años después de su última comparecencia.
“Hay que intentar mantenernos arriba y luchar por estar en Europa, para la que estamos matemáticamente clasificados”, ha señalado.
El director general del club desde 2021, Manuel Sevillano, que ha sido durante muchos años el estandarte del voleibol soriano, ha resaltado que el equipo lleva en la última década remontando hasta llegar al título de este fin de semana.
“Por suerte estamos en continúa crecimiento desde el primer año. Tuvimos un primer año en la que conseguimos no descender con jugadores respecados. Y al año siguiente, ya con mi llegada y tres chicos de fuera en un piso, fuimos tirando. Y año a año hemos ido creciendo y ya no tenemos que buscar sólo jovencitos de 19 años y a ver que pasa, sino que podemos buscar gente contrastada”, ha recordado.
Sevillano ha resaltado el buen rendimiento de los fichajes, aunque ha reconocido que el equipo sigue teniendo sus limitaciones presupuestarias –poco más de 200.000 euros-, en un mercado donde Guaguas es el rey, por su mayor presupuesto, y luego Almería y Teruel, además de Melilla Sport Y Valencia Leleman Conqueridor.
“Cuando ganas todo se revaloriza. Pienso que el título tiene que servir para dar un empujón a los patrocinios. El voleibol nacional se alimenta de subvenciones públicas”, ha apuntado.