Casado pide tranquilidad a vacunados con AstraZeneca
La consejera de Sanidad de Castilla y León, Verónica Casado, ha transmitido "un mensaje de tranquilidad" a las 30.144 personas que han sido vacunadas en Castilla y León con AstraZeneca tras los casos de trombos aparecidos y la suspensión de su administración por 15 días.
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Casado ha resaltado ayer, en su comparecencia ante los medios, que sigue siendo más favorable ponersela la vacuna que temer por unos efectos secundarios poco frecuentes.
"A todos los ciudadanos que han recibido la vacuna de AstraZeneca pedirles tranquilidad porque a día de hoy no hay evidencia científica que la relacione con los trombos" y que las vacunas se comernializan tras "estudios muy rigurosos".
Casado ha recordado que su retirada es temporal y que "volveremos" a administrarla, pero hay que tener cautela porque hay casos.
Castilla y León ha vacunado a miles de personas con AstraZeneca, pero hay margen para la segunda dosis.
De hecho, no está previsto que se haga de manera generalizada hasta el próximo mes de mayo ya que hay doce semanas de margen para la administración
Casado ha recordado que el síntoma observado en los escasos casos de trombos es "un dolor de cabeza muy intenso que no cede con los analgésicos habituales" y que "empeora con los movimientos, cuando nos tumbamos o hacemos esfuerzos" y que se puede combinar con dificultad para tragar o hablar.
En este caso, la consejera de Sanidad ha pedido acudir al médico.
"Es un efecto muy raro que puede aparecer a los tres días", ha puntualizado la consejera que ha recomendado llamar al centro de salud si aparecen síntomas como los descritos.
En todo caso, ha insistido en "no alarmarnos con los efectos secundarios normales de una vacuna, como un pequeño dolor de cabeza, dolor muscular o poca fiebre porque son síntomas normales".
